Los vecinos de Náquera han disfrutado de la cabalgata que se organiza anualmente y que sirve para que los habitantes de este municipio disfruten de una jornada de divertimento ataviados con los disfraces más inverosímiles.
Pau Tineo
Es uno de los actos más esperados por todos los vecinos. El último fin de semana de septiembre está, desde hace muchos años, coloreado en rojo en los almanaques de todos los vecinos de Náquera. Es el día de la cabalgata. Es una jornada grande para la localidad.
Los naqueranos esperan este día porque es uno de los más significativos para cada habitante de Náquera porque cada último sábado de septiembre es el día indicado para que vuele la imaginación. La cabalgata es la manifestación lúdica más participativa del municipio y año tras año se superan las expectativas.
Este año más de mil vecinos se han echado a la calle para ver el pasacalle de colorido, y disfrutar desde dentro del carnaval más autóctono de Náquera. Los organizadores sitúan en 1.000 personas los participantes y en unos 500 los que fueron parte activa de la comitiva que recorrió las calles principales del municipio en un recorrido lleno de diversión y alegría.