Se anuncia el inicio de las obras que, durante los próximos cuatro meses, contribuirán a mejorar el entorno del casco histórico

El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ha anunciado el inicio de las obras del proyecto Ruralter, una actuación integral urbanística que afectará al casco histórico, especialmente a la zona delimitada por el Castell, la Agencia de Desarrollo Local, la Cisterna y el Molí, sobre una superficie de 1.646 m2.

José García

Este proyecto se enmarca en la subvención Ruralter, que otorga la Generalidad Valenciana, con el objetivo de promover la conservación de los núcleos históricos, recuperando su entorno y poniéndolo en valor.

Las obras cuentan con un presupuesto de 579.527,82  euros y consistirán en el levantado de las actuales calles y aceras, la renovación de las instalaciones (soterramiento de líneas eléctricas, alumbrado público), repavimentación y la instalación de equipamiento, alumbrado público y mobiliario urbano nuevo. El plazo de ejecución aproximado será de cuatro meses.

El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ya ha solicitado una segunda fase de las obras que prolongarían la actuación por la calle Eusebio Benedito hasta el cruce de acceso al Ayuntamiento. Esta actuación, señalan fuentes del consistorio, permitirá poner valor el casco histórico, realzando la zona BIC (Bien de Interés Cultural) con la incorporación de elementos externos urbanos que unificarán la imagen de la zona y realzarán los edificios históricos, a través de iluminación monumental.

Asimismo, añaden fuentes consistoriales, “se restringirá la entrada de vehículos a un solo carril de acceso al aparcamiento subterráneo situado en la Plaza del Ayuntamiento priorizando los recorridos y pequeñas plazoletas para los peatones, una de ellas situada a la entrada del Molí”.

También se pondrá en valor la acequia, que quedará visiblemente señalizada y asegurada mediante barandilla para que pueda ser visitada. El arbolado en la zona también será utilizado de manera ornamental, quedando delimitada por dos cipreses a ambos lados, como a la entrada del Castell. La calzada será adoquinada en toda la zona y se habilitarán algunas plazas de aparcamiento a la altura del Convent de Les Monges.