Desde la Federación de Asociaciones de Vecinos ‘Camp de Túria’, en Náquera, se ha emitido un comunicado en el que señalan su descontento con el servicio que reciben desde el Consorcio Valencia Interior, así como su voluntad de protestar contra el pago de las facturas.
José García
Consideran estos vecinos que existen una serie de “irregularidades” por parte del ‘Consorcio Valencia Interior’ (CVI), la entidad encargada de transferir los residuos a los espacios en que éstos se tratan para ser reciclados, mientras que los que no pueden ser reutilizados son eliminados.
Desde esta agrupación vecina consideran que “el servicio no se está prestando realmente: la planta de tratamiento de Liria está paralizada y los residuos depositados sin control en los laterales de la calzada de acceso a la misma”.
Desde el CVI se replica que, aunque la planta de transferencia en Llíria y la de reciclaje en Caudete de la Sierra no están acabadas, sí se están enviando los residuos a otras plantas en los que son convenientemente tratados los residuos.
La asociación de vecinos añade que la recaudación por “la tasa es superior al coste del servicio”, que se han producido “errores en los padrones, imputándose como coste adicional el pago de factura que forma parte de los ingresos fallidos, las bajas y las devoluciones”. “Además, la elaboración de padrones carece de garantías legales, porque no se han expuesto al público ni se ha permitido a los vecinos formular alegaciones sobre los mismos”.
El CVI ha explicado que el importe del recibo que se envía se ha visto modificado por algunos fallos registrados en los dos primeros años, aunque esos desajustes ya se han corregido; de mismo modo, se insiste en que los vecinos que deseen efectuar sus reclamaciones pueden hacerlo a través de su página web o bien por teléfono.
Finalmente, los vecinos de Náquera critican que en el presupuesto 2012 “aparezcan gastos prescindibles y que se repercuten a los vecinos de forma injusta, arbitraria e injustificable, como los 68.000 euros para sueldos de altos cargos del Consorcio, los 45.000 euros en dietas del Consorcio; los 220.000 euros en gastos diversos sin especificar en el propio presupuesto o los 750.000 euros a pagar a la Diputación de Valencia por prestar el servicio de recaudación de la tasa”.
Desde el CVI se replica que todos los gastos están ajustados a los servicios que se prestan y que el funcionamiento del organigrama del propio Consorcio resulta “ejemplar” por el número reducido de personas que forman parte de él y que se encargan de supervisar la eficiencia de todo el proceso.
Con todo, desde la Junta directiva de la Federación de Asociaciones de Vecinos ‘Camp de Turia’, en Náquera, se anuncia que se va a presentar una moción en el Ayuntamiento de dicha localidad “para que se suspenda durante los ejercicios 2012 y 2013 el cobro a los vecinos de la tasa y se devuelvan a los vecinos los cobros efectuados el pasado día 13 de febrero de 2012”.