Se abrirán al público dos refugios de la Guerra Civil
El director general de Administración Local, Antoni Such, junto con el director territorial de Presidencia, Francisco Molina, han visitado esta mañana, acompañados por el alcalde de Riba-roja, Robert Raga, el resultado de las obras de recuperación de la torre y muralla árabe y la remodelación de su entorno.
El proyecto de restauración, que ha tenido un coste de 700.000 euros, financiados con los fondos de la UE y el presupuesto municipal, ha permitido la rehabilitación y mejora de una casa antigua situada en la Plaza de la Torre que contenía en su interior una torre árabe del siglo XI, así como un refugio de la Guerra Civil.
El Ayuntamiento de Riba-roja adquirió esta antigua torre situada en la zona de la muralla árabe con una superficie total de 345 metros cuadrados en dos plantas y adherida a la torre de origen musulmán incluida en el antiguo recinto fortificado, hoy convertido en un jardín anexo a la muralla.
La torre y la muralla forman parte de los importantes vestigios que la civilización árabe dejó a su paso por Riba-roja durante el siglo XI que hasta ahora había permanecido oculta y olvidada para los propios vecinos. La actuación municipal se ha completado con el descubrimiento de dos refugios de la Guerra Civil utilizados en su tiempo por familias de la localidad.
El consistorio abrirá sus puertas al público y se incluirá en la ruta ‘Caminando entre búnkeres y trincheras en Riba-roja de Túria‘, que recorre los antiguos refugios que durante la guerra civil se utilizaron como protección y amparo durante la batalla bélica. El recinto amurallado de Riba-roja está considerado como BIC junto a los yacimientos visigodos de Pla de Nadal y Valencia la Vella.
Durante la visita, Toni Such ha mostrado su satisfacción y agradecimiento al Ayuntamiento “por el trabajo que han hecho y el esfuerzo para recuperar un elemento patrimonial tan importante como es la Torre y parte de la muralla. Este entorno es magnífico, yo tuve la oportunidad de conocerlo cuando estaba completamente degradado, antes de iniciar de las obras, y ahora me ha impresionado”.
Such ha afirmado “el objetivo de la Generalitat y el Ayuntamiento de Riba-roja es poner en valor elementos patrimoniales, que estaban ahí, que eran de todos y que con recursos y mucha sensibilidad se han podido sacar adelante para el disfrute de los vecinos y vecinas del pueblo, así como un atractivo turístico”.
Such, que ha anunciado una nueva convocatoria de los Fondos Feder para finales de año, ha remarcado, “hemos hecho 106 actuaciones de recuperación del patrimonio a lo largo de toda la Comunidad Valenciano y estamos muy satisfechos es patente el esfuerzo de colaboración entre Ayuntamientos y la Generalitat”.
El alcalde ha asegurado “esta localización es una joya porque llevaba desde el siglo XI escondido, y la gente no lo podía visitar. Quiero agradecer a la familia propietaria de la casa privada que llegara a un acuerdo con el Ayuntamiento, así como a la Generalitat por hacerlo posible”. Asimismo ha añadido, “hemos recuperado además la Plaza de la Torre, lugar donde aparcaban los coches, no había ningún elemento para sentarse, estar tranquilos y con la aportaciones de los vecinos junto con la dirección técnica hemos recuperado su espíritu”.
A raíz de la aprobación por el pleno del Ayuntamiento en noviembre de 2020 de la propuesta de devolver el nombre original de “Plaça de la Torre” a la actual plaza conocida como “Plaza del doctor Don Ricardo Valenciano”, el consistorio ha colocado una placa en la fachada de la que fuera “casa consulta” en la que ejerció el médico de 1939 a 1980. Esta vivienda forma parte del conjunto de la recién remodelada plaza hoy convertida en una zona peatonal y lúdica.