Elía Verdevío (PP), alcaldesa de Bétera
Con solo tres casos activos de covid en un municipio que ha presentado las cifras más altas de la comarca, ¿qué balance hace de esta crisis desde la ya casi normalidad?
Ver que solo tenemos tres casos es motivo de pensar que volvemos a esa normalidad. Han sido casi dos años muy difíciles. Hemos trabajado duro, tomando decisiones que no eran de nuestra competencia para dar soluciones ante la falta de recursos, hasta de alimentos. Una vez más la administración local ha demostrado que puede afrontar crisis como esta pandemia y llevarlas a buen término.
¿Qué diferencias hay entre la Bétera de 2019 prepandemia y la actual?
Cuando entró el actual equipo de Gobierno la maquinaria estaba engrasada, los empresarios estaban con ganas de iniciar proyectos. Ahora estamos con un índice de paro importante y muchos hosteleros y comerciantes no han podido abrir de nuevo las persianas. Bétera no vuelve a ser la misma, pero hay alegría por volver a la normalidad por el ímpetu de los valencianos para salir adelante. Lo que demanda el vecino son cosas sencillas: empleo, seguridad y limpieza por eso estamos ahora con planes y talleres de empleo, vamos a reforzar la seguridad porque la pandemia lamentablemente nos ha traído inseguridad y están habiendo robos en el campo y en propiedades. En cuanto a la limpieza, que es cuestión de todos, aunque responsabilidad de la administración, el servicio no es el que se merecen los vecinos y estamos trabajando en sacar a licitación el nuevo servicio.
No me importa sentarme con Compromís para poder llevar adelante proyectos
A nivel político, la expulsión de la concejala de Mas Camarena, María José Yago, ha privado de la mayoría absoluta de la que disfrutaba el tripartito -PP, Mas Camarena y Ciudadanos-, ¿cómo se ha vivido esa situación dentro del equipo de Gobierno?
Esta pregunta creo que yo no tengo que responderla. El equipo de Gobierno ahora más que nunca es una piña. Quiero que quede claro porque cuando una concejala toma la decisión de votar lo que cree que debe votar es una decisión que toma ella, no la toma en consenso con el equipo de gobierno. Eso ha hecho un punto y aparte y ahora vamos a gobernar con minoría, sí, pero igual que cuando estábamos con mayoría, intentando el consenso. Ya lo buscamos y lo obtuvimos con Compromís con los presupuestos en plena pandemia. Hemos demostrado que somos un equipo de Gobierno de consenso. Con lo cual vamos a continuar unidos como una piña, a gobernar con minoría pero en consenso y a sacar los proyectos adelante.
¿Ve a la oposición con esa misma voluntad?
Compromís y PP han sido los polos opuestos pero la ventaja de la política local es que priman las personas. No me importa sentarme con Compromís para poder llevar adelante proyectos para el bien de nuestro municipio porque vamos a trabajar por los mismos vecinos. El objetivo es el espíritu de servicio y gobernamos para todos, vivan donde vivan y sean de donde sean. Y Compromís pensará lo mismo.
Estamos en uno de los miradores de la nueva ronda, desde donde se otea la Torre Bofilla, que por fin después de muchos años se ha materializado. ¿Qué se ha dado para que se haya ejecutado en este momento?
Lo que ha confluido es la voluntad de la Diputación y estoy muy agradecida a esa institución que es la administración más cercana a los ayuntamientos y a su presidente y al diputado de Carreteras por esta obra que era una reivindicación histórica.
Nuestros alumnos y los de Nàquera y Serra se merecen una enseñanza pública de calidad que no tienen
En pueblos vecinos como Olocau y San Antonio de Benagéber ya están en marcha las obras de construcción de los nuevos colegios dentro del Edificant. ¿Para cuándo la ampliación del IES les Alfàbegues y el nuevo instituto?
Desgraciadamente en Bétera no sé por qué no podría contestarte. Pero no tenemos la misma perspectiva y eso tenemos un problema más grave que ellos. Tenemos un instituto para 600 alumnos y hay más de mil. Nos han pasado la delegación de competencias de la ampliación que es una obra de casi 4 millones de euros con los alumnos dentro. Lo veo complicado. La solución la tiene que dar la conselleria. Nosotros vamos a ayudar a que sea compatible la obra con las clases y hemos buscado parcelas para hacer una aulario o instalar barracones durante las obras, pero pedimos que la construcción del nuevo instituto vaya a la vez porque la solución pasa por el nuevo centro y no veo esa voluntad por parte de la conselleria. Nuestros alumnos y los de Nàquera y Serra se merecen una enseñanza pública de calidad que no tienen. Están dando clases en la cafetería, en el aula de automoción y eso será compatible con las obras, no lo sé, lo lanzo al aire. Compaginar 1.200 alumnos sin alternativa de un aulario ni un nuevo instituto. Y no quiero sacar nada de atrás. Solo quiero que vean la realidad que tenemos.
El Centro Cívico en Torre en Conill se va a hacer pero con el doble del presupuesto inicial.
Teníamos la redacción del proyecto, pero la pandemia ha traído la subida en los materiales de construcción. Hemos tenido que hacer una modificación presupuestaria porque pasa de uno a dos millones. En breve se va a licitar la obra y el año que viene pondremos la primera piedra.
Han aprobado de forma rocambolesca la rebaja del IBI. ¿Cómo se reflejará en el recibo de 2022?
Yo no lo entendí, que se tuviera que convocar un pleno extraordinario dos días después del ordinario, pero lo importante es que la rebaja ha salido con la abstención del PSPV. Se rebajará un 10% en el recibo. El que paga 500 euros, pagará 450. Si se puede hacer una revisión para favorecer a más colectivos o bajar un punto más se hará.
Otro impuesto, la plusvalía -que han bonificado un 95% en las herencias- supone un ingreso de 1.650.000 euros, ¿cómo afectará a las arcas municipales la sentencia del Constitucional declarándolo nulo?
Es pronto para hacer una valoración. Lo que es importante es que llevábamos en el programa la bajada de impuestos y lo hemos cumplido porque podemos, tenemos una economía saneada y los vecinos se lo merecen.