El consistorio de Riba-roja de Túria liquida el presupuesto de 2015 con un superávit de 4,6 millones
El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ha cerrado el presupuesto municipal del 2015 con un superávit de 4,6 millones de euros que ha permitido saldar la deuda contraída con los bancos hasta llegar a cero gracias a la cancelación de los diferentes préstamos.
La liquidación de las cuentas municipales del 2015 revela que a lo largo del pasado año las arcas municipales ingresaron 27 millones de euros, mientras que se gastaron 20 millones, de forma que tras aplicar unos ajustes financieros de 1,7 millones de euros -correspondientes a gastos aplazados y transferencias de las administraciones públicas, entre otros- suponen un superávit de 4,6 millones.
El equipo de gobierno de Riba-roja de Túria ha trasladado esta cantidad al remanente de tesorería municipal hasta situar esta partida en 7,2 millones de euros que “permitirán destinar mayores volúmenes de inversión y gasto social en diversos programas del presupuesto de 2016”.
Además, el cierre de la liquidación ha fijado una liquidez financiera de 6,7 millones de euros por parte del ayuntamiento en las cuentas de los bancos.
De esta forma, la deuda municipal se ha eliminado por completo ya que el crédito del ICO de 3,8 millones de euros de Riba-roja de Túria para el pago a los proveedores se ha cancelado tras el abono de las cantidades pendientes del capital de amortización y “se convierte así en uno de los escasos municipios del Camp de Túria que carece de préstamos económicos”.
El informe de la intervención constata que el Ayuntamiento de Riba-roja “cumple con el objetivo de estabilidad presupuestaria, cumple la regla de gasto y cumple con el límite de deuda”.
El concejal de Hacienda, José Ángel Hernández, ha subrayado que los datos contenidos en la liquidación del 2015 “son el fruto del trabajo que los miembros del actual equipo de gobierno hemos realizado a lo largo de estos nueve meses al ajustar los gastos corrientes a la capacidad financiera del ayuntamiento, además de las tareas de organización y optimización de los recursos públicos con el ánimo de mejorar las prestaciones para los vecinos sin necesidad de incrementar los impuestos y las tasas”.
Hernández ha recordado que por fin la Generalitat se ha puesto al día en los pagos de los servicios que son de su competencia tras abonar los 3,1 millones de euros que adeudaba “por la desidia y el despilfarro del PP”.
A la vista de los datos “afrontamos con un optimismo razonable las cuentas de 2016 gracias a la capacidad para generar nuevos ingresos sin aumentar impuestos, continuar pagando los gastos corrientes, especialmente a los proveedores, y unos servicios públicos centrados en los servicios sociales, el empleo y las nuevas infraestructuras”.
El presupuesto de 2016 contendrá una rebaja generaliza de los impuestos y las tasas, sobre todo el impuesto de bienes inmuebles con rebajas del 5% o hasta cerca del 50% en los impuestos correspondientes a los vehículos industriales.
Sin embargo, el equipo de gobierno ha alertado de los riesgos económicos que corre el Ayuntamiento de Riba-roja a medio y largo plazo por las posibles sentencias judiciales y las reclamaciones por parte de los propietarios por valor de hasta 36 millones de euros a razón de 14 millones por juicios y litigios de particulares y empresas y los restantes 22 millones en las indemnizaciones al Valencia derivadas del PAI de Porxinos anulado por el Tribunal Supremo.