Un solitario gol de Jorge Monzó, en una jugada en el que la fortuna acompañó (a diferencia de tantas otras veces) al FBAC Benaguasil, le permite al conjunto benaguasilero seguir soñando con la permanencia en Primera Regional. El equipo de Fragua se vació sobre el terreno de juego y supo sufrir… y acabó saboreando 3 puntos que le saben a gloria al conjunto local.
JGC
Pocas veces tres puntos tienen tanto valor para un equipo como lo han tenido para los jugadores del FBAC Benaguasil los que ha obtenido por su triunfo sobre el Racing Paterna CF (un equipo, conviene recordarlo, que llegaba a este choque con serias aspiraciones en la lucha por el ascenso… y que había logrado superar un 3-0 en el campo del CD Casinos, consiguiendo al final un 3-3 en un campo en el que es complicadísimo puntuar).
Sin embargo, y sin querer restarle ni un ápice de mérito al conjunto entrenado por Fragua, debemos ser rigurosos en el análisis y no dejarnos llevar por apasionamientos ni euforias: no hizo el FBAC Benaguasil un gran partido, ya que el Racing Paterna dominó la mayor parte del encuentro y tuvo mejor trato del balón y más ocasiones de gol… sin embargo, mereció el triunfo el equipo local.
¿Cómo es posible esta aparente contradicción? Porque, por primera vez en muchas semanas, hizo el FBAC Benaguasil lo que tantas veces hemos reclamado: demostrar a su rival que NADIE va a llevarse los puntos de su campo sin tener que pelear hasta la extenuación. Lo primero que sen los futbolistas que saltan al terreno del juego del estadio del Liverpool FC es un cartel en el que se puede leer: “This is ANFIELD”. El sábado, parece ser que alguien puso un cartel en el campo benaguasilero: “Acò és EL BARRANQUET”.
Los futbolistas locales salieron al campo enardecidos. Apenas se había disputado el primer minuto cuando llegaba una doble oportunidad; en el partido contra el Ribarroja CF hubo que esperar 90 minutos para contemplar un bagaje ofensivo igual… y, ante el CD Camporrobles, ni siquiera se logró equiparar en todo el partido lo mostrado por los pupilos de Fragua en los primeros 60 segundos de encuentro.
Fragua apostó por una defensa granítica (con Roda y Pulec en su eje) y un centro del campo blindado (con Kevin y Josep aportando músculo), en el que Javi ponía el toque; arriba, Sevillano se movía en zigzag, mientras que Jorge Monzó y Mario se repartían las bandas. No le agradaba este planteamiento al Racing Paterna CF, acostumbrado a tocar bien el balón… pero sin profundidad, ante un equipo que se replegaba con presteza y se lanzaba a por el balón con fiereza. Mordían los locales y lo notaban los visitantes.
El conjunto paternero, pese a todo, tiene mucha calidad y posee mucha gente de toque en casi todas las zonas del campo… y dispone de un puñal en su banda izquierda del ataque. En una jugada aislada, un doble quiebro de uno de sus delanteros acababa con un remate alto que silenciaba a la afición local. El FBAC Benaguasil apenas tenía presencia arriba, pero en la batalla por el centro del campo siempre triunfaba Kevin en los balones aéreos y Enric a la hora de barrer el esférico a ras de suelo. El jugador poblano acabó el partido en el suelo, sufriendo tras haber sufrido un doloroso tirón, y después de haberlo dado todo durante todo el encuentro.
A punto de cumplirse la primera media hora del partido, un balón colgado por Jorge Monzó desde casi el centro del campo se paseaba por el corazón del área visitante… y, tras botar cerca del arquero rival, acababa dentro de la portería paternera… después de que nadie tocara el esférico. La grada tardó en cantar el gol… la falta de costumbre y las muchas desilusiones sufridas este año por parte de la hinchada benaguasilera (en forma de actuaciones arbitrales desfavorables) habían convertido la ilusión en incredulidad… Al final, cuando el colegiado señaló el centro del campo, se pudo cantar el gol con verdadera alegría…
Apenas cinco minutos después, el Racing de Paterna contestaba con una acción idéntica, que también acabó en gol… aunque éste fue anulado, porque (solamente) había 4 futbolistas visitantes en un claro fuera de juego, en la acción de remate. Siguió el conjunto paternero achuchando, pero Roda y Pulec firmaban una magnífica primera parte, abortando cada acción de ataque rival, y el primer acto acababa con la mínima renta local.
El segundo acto fue un verdadero suplicio para el aficionado local: el Racing Paterna CF saltó al terreno mucho más vertical y ambicioso, aprovechando la velocidad de sus futbolistas en el flanco derecho de la zaga local. Un par de avisos visitantes volvían a extender la angustia entre la grada local. Guillermo, por su parte, se multiplicaba en su lateral e impedía que llegaran los futbolistas rivales por esa banda.
En el centro del campo seguía brillando con luz propia Josep, que se animaba a sumarse al ataque con un desparpajo impropio de un futbolista que habitualmente juega como central. Con Sevillano cansado (y amonestado), Fragua dio entrada a Orellano. Poco después, un Javi exhausto cedía su lugar a Monfort… y Monzó se ganaba el aplauso de su público (que supo recompensar no sólo su gol, sino su generoso esfuerzo en cada segundo que estuvo sobre el terreno de juego), siendo reemplazado por Óscar.
El Racing Paterna CF comandaba el juego con total autoridad, aunque algunos contragolpes esporádicos del FBAC Benaguasil le obligaban a jugar de reojo… sin perder de vista su portería. Sufría el conjunto local en cada balón que se colgaba a su área y parecía que el segundo tiempo iba a alargarse mucho… mientras algunos aficionados locales comenzaban a temer que su equipo iba a nadar mucho, para acabar muriendo poco antes de llegar a la playa.
Lo cierto es que esa teoría tenía muchos visos de cumplirse… y también es verdad que el colegiado del encuentro contribuyó notablemente a ello. Se sintió el trencilla intimidado por el ambiente del campo benaguasilero antes incluso de que se iniciara el encuentro, y él mismo contribuyó a caldear el ambiente con algunos gestos que indignaron a jugadores, técnicos y aficionados. En los últimos cinco minutos de tiempo reglamentado no señaló nada que pudiera beneficiar a los jugadores locales: ni faltas ni fueras de banda… ni tampoco vio los fueras de juego visitantes ni la agresión que sufrió Monfort, por parte de un jugador contrario que estaba tendido sobre el césped…
…y decimos del tiempo reglamentado porque, además de los 45 minutos que forman parte del tiempo de juego de cada mitad, el árbitro quiso alargar el encuentro… ¡8 minutos! Y, en ese tiempo, convirtió dos claras faltas a favor del FBAC Benaguasil en libres indirectos a favor del Racing Paterna CF… por cierto, que en una de dichas acciones hubo un control clamoroso de uno de los futbolistas visitantes con la mano, para acomodarse el balón y acabar rematando (afortunadamente, directamente fuera), que tampoco fue visto por el colegiado.
Cuando los aficionados locales recitaban su vigesimotercer avemaría, pidiendo a la Montieleta que obrase el milagro de hacer que el encuentro finalizara, encontró el trencilla el valor necesario para acabar con el sufrimiento benaguasilero y pitar el final del encuentro. Al final, los puntos se quedaban en casa y los chicos de Fragua pueden seguir soñando con la permanencia.
FBAC Benaguasil: Xus; Ignacio, Pulec, Roda, Guillermo; Mario (Jaime), Kevin, Javi (Óscar), Josep, Jorge Monzó (Monfort); Sevillano (Orellano).
Torrent CF:
Goles: 1-0: Jorge Monzó (30’).
Fragua, entrenador del FBAC Benaguasil: “El equipo ha trabajado bien y se nota el trbajo efectuado durante la semana, tanto físico como psicológico. Hemos sabido sufrir, nos hemos sacrificado al máximo y hemos tenido la recompensa del gol en una acción a balón parado. El fútbol nos está dando una oportunidad y no podemos desaprovecharla. Hay que seguir luchando hasta el final y, si no nos damos por vencidos, puede lograrse el objetivo”.