El equipo de gobierno de Bétera (PP y UPIB) ha cambiado su decisión respecto a la posibilidad de privatizar el servicio de gestión del agua: en el casco urbano del municipio seguirá siendo gestionada de forma pública, a diferencia de las urbanizaciones.
José García
La movilización del colectivo ciudadano ‘Bétera per l’aigua’ ha conseguido cambiar la postura de los gobernantes beterenses y, al final, no se privatizará la gestión del agua en el casco urbano. El alcalde de la localidad, el popular Germán Cotanda, ha anunciado la decisión que ha tomado al respecto: “La gestión del agua no será privatizada en el casco urbano de Bétera. Nos hemos reunido con los vecinos, hemos estudiado la situación detenidamente y hemos decidido cambiar la decisión que teníamos prevista”.
“Cuando elegimos privatizar ese servicio, lo hicimos porque pensábamos que era lo mejor para el pueblo; sabíamos que era una decisión impopular, pero la creímos necesaria. Sin embargo, en las reuniones con los representantes de ‘Betera per l’aigua’ hemos visto que había un rechazo mayoritario a esa decisión y hemos comprendido que era mejor optar por otras alternativas, sobre las que ya estamos trabajando”, ha explicado a InfoTúria el primer edil beterense.
El alcalde de Bétera ha señalado que “asume la responsabilidad de la decisión” y ha añadido que el camino que se va a tomar ahora “pasa por obtener el máximo consenso posible, exponiendo nuestras nuevas alternativas a los partidos de la oposición y contando con un respaldo muy mayoritario”.
El dirigente beterense ha confirmado que “se van a deshacer los pliegos que se habían redactado en conjunto, y separar una parte de otra, porque los pozos municipales no se van a externalizar. Éstos se van a continuar gestionando por parte del Ayuntamiento, y tendremos que tomar otras medidas, por las necesidades que presenta el servicio”.
El servicio se deberá modificar, explican fuentes consistoriales, porque es efectuar una inversión que permita mejorar la calidad del agua, en la que existe una presencia excesiva de nitratos; además, la cuantía de las facturas que pagan los vecinos por el agua no cubre los costes derivados de la prestación del servicio.
‘Bétera per l’Aigua’
Desde la plataforma ciudadana ‘Bétera per l’Aigua’ se admite que el resultado obtenido “es muy satisfactorio y es toda una inyección de moral, porque sirve para demostrar que la acción ciudadana, organizada y basada en datos objetivos y en reivindicaciones justas, sirve para obtener las decisiones adecuadas”.
“Queremos agradecer la participación a cada una de las más de 4.500 personas que firmaron nuestro manifiesto en contra de la privatización del agua, una cifra que representa a más de la mitad del censo del casco urbano, que es la gente que se iba a ver afectada por esta privatización; también damos las gracias a las personas que nos ayudaron a recoger firmas, y agradecemos al equipo de gobierno su voluntad de escuchar nuestra postura, así como haber tomado la decisión finalmente adoptada, que es la que defendíamos nosotros”, explica el portavoz de este colectivo ciudadano, Pau Pertegaz.
Partidos de la oposición
Desde la oposición se ha mostrado una postura favorable a la plataforma ciudadana ‘Bétera per l’aigua’, aunque ninguno de sus representantes ha querido formar parte ‘visible’ de este colectivo. Sin embargo, las distintas formaciones se han mostrado muy satisfechas del desenlace producido en este asunto.
En el PSOE, la portavoz socialista se ha mostrado a favor de la decisión adoptada por el gobierno local, aunque ha recordado que “el presupuesto recientemente adoptado contaba con 3 millones de euros, que provenían de la privatización que ahora se paraliza, por lo que permaneceremos atentos a cómo pretende obtener esa cantidad el Ayuntamiento”.
Cristina Alemany, representante de la ‘Coalició Compromís’ en el Ayuntamiento de Bétera ha explicado que su formación política “intentará colaborar” en la tarea de buscar el dinero que pensaba obtener el consistorio a través de la privatización del servicio del agua y ha calificado esta rectificación como “un éxito”.
Desde EUPV, sin representación política en el consistorio pero con una firme postura de apoyo a la reclamación de la plataforma ‘Bétera per l’aigua’ fue una de las primeras en efectuar una valoración del cambio de postura del equipo de gobierno local: “Felicitamos a los vecinos y vecinas de la localidad, porque gracias a sus acciones reivindicativas y a su firme decisión de parar la privatización de la gestión del agua se ha logrado ese objetivo”.