La gestora se reúne con responsables populares del Camp de Túria
La gestora del PP provincial se reunió ayer con los responsables populares de los municipios de Camp de Turia para analizar la situación, necesidades y reivindicaciones de los diferentes pueblos de la comarca en materia de política social, sanitaria, dependencia e infraestructuras.
Al encuentro comarcal han asistido el presidente de la gestora, Rubén Moreno, María José Catalá y Antonio Clemente, como miembros de la dirección provincial y la presidenta comarcal del PP, Mari Carmen Contelles.
Los populares han defendido la necesidad de contar con una residencia y centro de día para discapacitados en la comarca con más de 160.000 habitantes y “un alto número de personas con algún tipo de discapacidad severa que precisan de una atención especial y personalizada que a día de hoy es muy escasa debido a las políticas del Consell”.
Respecto al centro de menores previsto en Llíria han expresado su rechazo a la ubicación en la antigua prisión ya que “no es el adecuado para la integración social y la atención que requieren dichos menores por su distancia de los centros educativos y sanitarios y la falta de comunicaciones mediante transporte público”.
En materia de infraestructuras, el PP a defendido que la CV-50 es “vital” para el desarrollo de toda la comarca. “Si el tramo pendiente no se ejecuta es porque no hay voluntad política de hacerlo”, han manifestado los responsables populares en un comunicado posterior a la reunión.
Asismismo, han demandado la construcción de la variante de Pedralba, una obra “absolutamente necesaria para eliminar el paso de vehículos pesados por el centro de la localidad y reducir el peligro para las personas, así como problemas de contaminación acústica y atmosférica”.
Por último, han reclamado la implantación de un sistema de transporte “eficaz y acorde a las necesidades de los ciudadanos” para acceder al Hospital de Llíria, así como la “urgencia de mejorar los servicios de obstetricia y pediatría” del centro sanitario.
El PPVAL pedirá la incorporación de estos proyectos a los presupuestos de la Generalitat para el 2018 para que el Consell “no los condene al ostracismo”.