El PP y la guerra del agua en Bétera

Daría Terrádez, portavoz de Compromís per Bétera

La señora Elia Verdevío y sus compañeros del Partido Popular parecen dispuestos a resucitar la ya casi olvidada Guerra del Agua en Bétera. Nos espera una macro campaña electoral de dos meses que, con toda seguridad, estará “pasada por agua”. Volverá la crispación, el enfrentamiento y la guerra de pancartas y noticias medio verdaderas. Es su manera de entender la política local desde la derrota electoral sufrida hace cuatro años.

La señora Verdevío se ha convertido, de repente, en la garante de la salud de los vecinos de Bétera, en nuestra salvadora, en la única que, parece ser, conoce la solución y es capaz de ponerla en marcha, ante el grave problema de los niveles de nitratos en el agua potable del núcleo urbano de Bétera.

Es cierto que el agua potable que consumimos en el núcleo urbano de Bétera supera los límites establecidos por la OMS, pero no es menos cierto que esto viene ocurriendo desde 2005, es decir, es un problema que se viene arrastrando desde hace 14 años. Pero lo que se le olvida decir a la señora Verdevío es que de esos 14 años, durante los 10 primeros gobernó nuestro pueblo el PP, el partido al que representa y por el que se presenta como candidata a la Alcaldía, y de esos 10 años ella formó parte del equipo de gobierno municipal durante ocho años.

La pregunta es obvia y se nos viene a la mente rápidamente. Si la solución es tan fácil y rápida de aplicar según dice la candidata a la Alcaldía del PP, ¿Por qué razón no la aplicaron en los 10 años que gobernaron y convivieron con el problema? ¿Qué hizo el PP durante esos 10 años para solucionar este grave problema? ¿Por qué los vecinos nunca tuvimos conocimiento durante esos 10 años de que nuestros hijos estaban consumiendo agua no adecuada para ellos?

Ahora resulta que la señora Verdevío se despacha en prensa diciendo que “Aquella vecina o vecino que de alguna manera esté consumiendo agua del grifo, a largo plazo puede tener problemas de salud, y esto es muy serio”. Durante 10 años su partido y usted, señora Verdevío, mantuvieron en silencio y oculto el problema ante los vecinos, a sabiendas que podía ser un problema para la salud, dejando que siguiéramos consumiendo, nosotros y nuestros hijos, el agua que podría traernos graves problemas de salud. ¿Y usted quiere ser nuestra alcaldesa?

Usted afirma que “Los populares de Bétera llevamos tiempo peleando por mejorar la calidad del agua”. Será desde que están en la oposición, porque durante 12 años al frente del gobierno municipal su única ocurrencia al respecto de este tema fue intentar privatizar el servicio de agua potable para quitarse el problema de encima y que los vecinos pasáramos a pagar el agua con exceso de nitratos a precio de oro y perdiéramos el control tanto del agua como de nuestros pozos municipales.

¿Qué se ha hecho durante los últimos cuatro años, en los que el PP no ha gobernado, para solucionar este problema? Licitar y adjudicar por valor de 900.000 euros el proyecto de sectorización y renovación de nuestra red de agua potable, paso previo necesario para poder inyectar agua sin nitratos a la red, inversión valorada en otros 850.000 euros, que será el siguiente paso. Instalar fuentes de ósmosis inversa, de uso público y gratuito para que los vecinos puedan abastecerse de agua de calidad mientras se termina de solucionar el problema. Y desde el curso pasado, suministrar agua embotellada a los colegios públicos y concertados donde existen alumnos susceptibles de sufrir la restricción de consumo.

Como ve, señora Verdevío, las soluciones ya están en marcha. Así es fácil comprometerse con los vecinos a solucionar el problema, cuando sabe que la solución está en marcha y próxima. ¿Qué será lo próximo, asegurar que usted conseguirá que se haga la Variante Norte de Bétera porque también sabe que está licitada y adjudicada? Algo que tampoco fueron ustedes capaces de conseguir en sus 12 años de gobierno municipal.

Usted y sus compañeros de partido siguen teniendo un problema grave, siguen pensando que los vecinos carecemos de criterio, somos cortos de memoria, estamos faltos de información y somos fácilmente manejables. Eso les llevó a la derrota electoral y les seguirá, esperemos, manteniendo en la oposición, al menos hasta que sean capaces de darse cuenta que a los vecinos ya no se les manipula, ya no se creen las medias verdades y prefieren como gobernantes a personas sensatas, coherentes, transparentes y eficaces.