El Ayuntamiento de La Pobla de Vallbona ha anunciado que la gerencia regional del Catastro, dependiente de la delegación de Economía y Hacienda del gobierno de España en la Comunidad Valenciana, ha aceptado las alegaciones presentadas por el consistorio, reduciéndose en un 50% en el caso de las zonas agrícolas urbanizables.
José García
La imposibilidad que existe en la actualidad de que los suelos que cambiaron su calificación de rústica a urbanizable se acaben ejecutando a corto plazo ha facilitado que se tomaran en cuenta las alegaciones presentadas por el consistorio poblano, con lo que la crisis inmobiliaria (que tantos estragos ha causado y sigue causando) ha concedido un pequeño respiro a los propietarios de dichos terrenos. Así, se han rebajado los valores catastrales de diversos sectores del término municipal cuyo proceso de transformación urbanística no se ha iniciado “debido a la crisis financiera y económica”, y que continúan siendo terrenos en su mayor parte de uso agrícola, “con lo que no pueden equipararse a sectores ya desarrollados”.
“Esta no es la única rebaja conseguida”, explican los representantes del consistorio, “ya que en las zonas más antiguas del casco urbano en núcleos como Les Casetes, Les Ventes o el Barri y urbanizaciones como el Barranquet se ha rebajado el valor del suelo más de un 30 %”. Estas zonas, cuyo valor catastral era menor debido a sus características, se habían visto afectadas por la unificación de criterios y por subir varios escalones en su valoración.
Junto a ello, se ha aplicado una reducción del 60% del valor del suelo en parcelas ubicadas en bolsas de suelo pendientes de urbanizar que no formen parte de ningún Plan de Actuación Integral (PAI). Otras zonas en los que se ha rebajado la revisión son los sectores de la ‘Vila Est’ y la ‘Vila Oest’, afectadas por valores de máxima edificabilidad, aceptándose la alegación municipal de que “son zonas cuyo proceso de edificación no se ha iniciado, ni se prevé que se inicie a corto plazo, y que además son en su mayor parte pequeñas parcelas de propietarios del municipio que no pretenden promover ventas de viviendas sino construcción de casas de uso particular”.
La alcaldesa de La Pobla de Vallbona, la popular Mari Carmen Contelles, ha manifestado que “estamos ante una extraordinaria noticia, ya que hemos conseguido que en la situación económica como la que vivimos, se rebajen las cargas fiscales a muchísimas familias de La Pobla. Creemos que se ha hecho justicia con muchas zonas urbanas y agrícolas cuya valoración creíamos que no era acorde con la realidad”.
ACTUALMENTE TEATRO,
A LA CASA DE LA CULTURA DE LA POBLA DE VALLBONA
Nueva versión de “La cena de los idiotas” o “COMO JODER LOS CONTRIBUYENTES EN TRES ACTOS”
Actúa Grupo “Los Gobernantes”
Resumen:
PRIMER ACTO: Se notifica al pueblo una subida de impuestos de 200%,
SEGUNDO ACTO: Se anuncia, después de un tiempo y a bombo y platillo: “L’ajuntament de La Pobla aconsegueix que es rebaixe al 50%”
TERCER ACTO: Se cuelgan la medalla y algunos incautos aun dirán gracias, creyendo que van a pagar menos cuando el resultado de la función es una subida de impuestos de 150%.
¿No seria más decente, por respeto por los que pagan, ser honestos? Y en vez copiar las falsas rebajas, decir que es necesaria una subida de impuestos y si no lo es, anular la revision catastral. De lo contrario nos invitan a “la cena de los idiotas”