Denuncian la existencia de dos postes en mitad de la calle Amistat de Maravista

El PSPV de la Pobla de Vallbona ha denunciado la existencia de dos postes de electricidad en mitad de la calle la Amistat de la urbanización Nova Maravisa, ubicada en el área este del municipio, junto a la autovía de Ademuz.

Pau Tineo

Al igual que hace unos meses se Iniciativa denunciara la existencia de dos postes de luz en mitad de la calzada de las urbanizaciones de Xelvaneta y Xelardo, ahora se une la denuncia de los socialistas de La Pobla por unos postes eléctricos que ocupan un espacio importante de una calzada de la urbanización Maravisa y poniendo en peligro a los viandantes y vehículos que transitan por esta área residencial.

El grupo socialista ha recordado que esta grave situación se arrastra desde hace meses y no se ha llevado ninguna iniciativa al respecto por parte del consistorio poblano pese a la gravedad de los hechos denunciados  y las múltiples protestas de los propios vecinos afectados.

El cable eléctrico atraviesa de lado a lado la calle en sentido paralelo a las viviendas unifamiliares de Nova Maravisa a través de los dos postes que están situados frente a los chalés y provoca numerosos problemas a los vehículos que pasan por esta vía. Los dos postes de luz están reforzados, a su vez, por otros cables situados en las inmediaciones de los mismos.   

El portavoz municipal socialista, Jaume Cortina, ha tachado de “lamentable” la gestión del Ayuntamiento “al permitir que los vecinos tengan que convivir a diario con el enorme peligro que suponen los postes en mitad de una calle, especialmente, para los vehículos y motocicletas que transitan por este lugar; sin embargo, parece que las prioridades del PP son otras ajenas al interés general de sus vecinos pues no han movido un solo dedo en meses”.

En declaraciones a InfoTúria del concejal de Servicios Públicos del Ayuntamiento, Héctor Llorens, nos explica que “la obra de electrificación de la zona de la Conarda-Les penyes aun está finalizandose, sin menoscabo de que alguna calle pueda estar ya totalmente terminada”. También recalca que “en el actual contexto de crisis estas actuaciones no pueden hacerse a la ligera, puesto que enterrar los cables de luz puede suponer para el vecino unos gastos de más de 1.000 €”.