El Ayuntamiento pasa de tener 4 a 7 siete concejales liberados
El pleno extraordinario del Ayuntamiento de Llíria ha aprobado esta tarde el reparto de delegaciones entre los 11 miembros del nuevo gobierno local -seis del PSPV y 5 de Compromís-Move- y el régimen de retribuciones.
El nuevo ejecutivo salido del pacto de l’Almodí contará con siete concejales liberados: cuatro del PSPV (Fina Torrijos, Ferran Pina -que ha dimitido para ocupar la plaza de jefe de prensa a la Conselleria de Sanidad- Consuelo Morató e Isabel Llopis); dos de Compromís (Joanma Miguel y Vallivana Murgui) y uno de Move (Mari Cruz García), frente a los cuatro de la pasada legislatura.
Todos ellos, percibirán un sueldo del consistorio en función del porcentaje de dedicación. El PSPV mantiene un concejal liberado al 100% y suma dos al 75% y uno al 50%, mientras que su socio de Gobierno pasa de uno a tres concejales liberados al 100%.
Éstos últimos cobrarán 36.680 euros brutos anuales, mientras que al 75% percibirán 27.510 euros y al 50%,18.340 euros. De esta forma, tanto los concejales liberados del PSPV como los de Compromís-Move sumarán en total la misma cantidad, 110.040 euros, lo que supone 220.080 euros en sueldos a concejales.
A estos gastos hay que sumar los sueldos de los tres puestos de personal eventual asignados a las áreas de gobierno -Alcaldía, Atención Ciudadana y Urbanismo- que cobrarán 18.340 euros cada uno.
Todo esto suma un montante de 275.100 euros en nóminas -a los que hay que sumar los gastos de Seguridad Social- frente a los 128.380 euros de la pasada legislatura. A esto hay que añadir un sueldo más por un eventual que tendrá el grupo municipal popular tras la enmienda presentada en el pleno por el PP y que salió adelante con los votos en contra del PSPV. La portavoz popular, Reme Mazzolari, explicó que ha rechazado la oferta de liberar a un concejal porque “entendemos que en la oposición no tenemos que estar liberados”, pero defendió que “es importante estar asistido porque cada uno tenemos nuestro trabajo y precisamos de un interlocutor con los vecinos”.
El portavoz y único concejal de Ciudadanos, José Antonio Fombuena, siguió los pasos de los populares, que cuentan con nueve concejales, y presentó una enmienda para solicitar también un asesor, aunque en su caso sin éxito.
Por lo que respecta al alcalde Manolo Civera, continuará sin cobrar nómina del Ayuntamiento de Llíria, pero cobrará pos asistencia a órganos colegiados y seguirá como representante del consistorio en el Consorcio Valencia Interior.
En cuanto a los grupos municipales percibirán un fijo de 225 euros al mes y los concejales sin dedicación cobrarán por asistencia a órganos colegiados una cantidad que oscila entre los 50 euros de la junta de portavoces y los 200 euros por pleno. También cobrarán 85 euros por la celebración de bodas civiles.
La portavoz del PP justificó su voto en contra en que el alcalde debe estar liberado y los porcentajes de las concejalías no están acordes con la carga de trabajo y las responsablidades “No estamos en contra de que los concejales que trabajan tengan su retribución, pero preguntó por qué en 2015 dijo que habían bajado 10.000 euros de gasto y ahora han subido en 120.000 euros”.
Civera justificó que “son las decisiones del equipo de Gobierno, no hay nada más que explicar”. Respecto a su situación defendió que “no he cobrado nunca de un ayuntamiento, es una decisión personal y no estoy aquí por dinero”.
Que bonito queda eso de una decision personal de no cobrar nunca de un ayuntamiento si ten cuenta que es ese pertenecer a un ayuntamiento lo que te permite ser presidente de un consorcio del que si cobras. No cobras de donde te pueden votar, o no, pero no tienes reparos en cobrar de donde los que pagan nunca te van a pider votar o no votar. Y mientras tanto el consorcio hecho unos zorros. https://www.mixcloud.com/Ardacho/el-asiento-del-conductor-07/