Hay cinco detenidos de nacionalidad española y búlgara de entre 22 y 55 años
La Guardia Civil ha detenido en Llíria a cinco personas por haber estafado mediante compraventas fraudulentas de coches, a través de páginas webs especializadas en este tipo de comercio, un total de 19.000 euros en toda España.
Los detenidos, tres mujeres y dos hombres de edades entre los 22 y 55 años, de nacionalidad española y búlgara y, en su mayoría, miembros de una misma familia, son sospechosos de los delitos de estafa, usurpación de identidad y pertenencia a organización criminal.
Se les considera responsables de 15 estafas cuyas víctimas procedían de Valencia, Alicante, Almería, Cádiz, Cantabria, Castellón, Huelva, Madrid, Huesca, Vizcaya y Soria.
El grupo criminal obtenía los datos e imágenes de los vehículos anunciados de las citadas web de compraventa, e incluso en algunos casos llegaron a contactar con los propietarios de los vehículos, haciéndose pasar por supuestos compradores, y solicitándoles copia de la documentación del vehículo o del DNI de los titulares, con la excusa de realizar un contrato de compraventa, cosa que en ninguno de los casos se llegaba a materializar.
Una vez que los estafadores tenían las imágenes del vehículo, e incluso copias de la documentación del coche o de su titular legítimo, duplicaban el anuncio en una segunda web de compraventa a un precio menor, de tal forma que cuando los compradores se interesaban, los estafadores aportaban la documentación obtenida anteriormente, ganándose de esta forma la confianza de las víctimas.
Posteriormente, los estafadores iban progresivamente solicitando la realización de transferencias de efectivo en concepto de reserva, gastos de transporte del vehículo o cambio de titular, hasta que la víctima, una vez había hecho varias transferencias durante el proceso de compra, se percataba de que estaba sufriendo una estafa.
En ese momento los integrantes de la organización proferían todo tipo de amenazas con la finalidad de que los perjudicados no presentasen denuncia.
Sin embargo, el pasado mes de febrero, uno de estos perjudicados denunció los hechos, lo que puso en marcha una investigación que identificó como sospechosos a los miembros de este grupo compuesto por un primer nivel dedicado a hacerse pasar por supuestos compradores para obtener la documentación de los vehículos y de sus titulares; un segundo escalón encargado de duplicar el anuncio en otras webs, y un tercero encargado de la apertura de cuentas bancarias, destino del efectivo estafado.