A la mitad de la deuda le falta la firma del funcionario o político responsable
La portavoz del Partido Popular, Reme Mazzolari, ha denunciado en el último pleno que el Ayuntamiento de Llíria tiene un total de 667.000 euros en facturas de proveedores sin pagar. Una situación que ha calificado de “inadmisible”, ya que este retraso “está ocasionando serios problemas a los proveedores”.
Asimismo, la popular ha explicado que de los 667.000 euros, 326.000 euros son facturas sin conformar porque les falta la firma del funcionario responsable o del político gestor del área, 150.000 euros son de facturas ya aprobadas pero que todavía no han sido pagadas y otros 170.000 euros en facturas que están reconocidas pero no pueden tramitarse porque se realizó el gasto sin tener crédito presupuestario.
La portavoz ha exigido al responsable del área de Hacienda, Joanma Miguel, que “se ponga al día en la regularización de las facturas, especialmente aquellas que dependen de la autorización del concejal o funcionario responsable”.
Mazzolari ha manifestado su preocupación porque “esta parálisis muestra la falta del gestión del Gobierno del PSOE y Compromís-MOVE y lo más preocupante son las facturas que no tienen consignación presupuestaria porque sólo serán abonadas cuando haya un reconocimiento de crédito”, un mecanismo de pago excepcional que tiene que ser aprobado en el pleno.
Finalmente, ha advertido que “a esta parálisis en la gestión se suma los gastos superfluos del Gobierno de izquierdas en viajes, kilometrajes y dietas, la constante pérdida de subvenciones por incumplimiento de plazos y la renuncia de numerosas líneas de subvenciones, lo que sitúa a Llíria en el furgón de cola de inversiones”.