El alcalde de Llíria, el popular Manuel Izquierdo, se ha reunido con los representantes de las dos posturas que se enfrentan respecto a las obras que pueden acabar demoliendo el teatro-auditorio de la Unió Musical de Llíria.
Como ya se ha publicado anteriormente en InfoTuria, la directiva de esta asociación defiende la idoneidad de la demolición del teatro. José Vicente Alcaide, presidente de la Unió Musical, ha manifestado en varias ocasiones que la Conselleria de Cultura va a aportar 3,6 millones de euros para la construcción del nuevo auditorio y que ya admitido las facturas de los primeros 500.000 euros. Frente a esta postura se sitúan un grupo de socios que se opone a esta medida y que propone otras alternativas con un coste más bajo y que se ajusten más a la situación económica actual de esta sociedad.
Los representantes del consistorio edetano (el alcalde y el primer teniente de alcalde) que se reunieron recientemente con las dos partes enfrentadas manifestaron a la salida de dicha reunión que el ambiente del encuentro había sido “agradable”, aunque no se pudo alcanzar ningún tipo de acuerdo.
Manuel Izquierdo ha explicado en reiteradas ocasiones que el Ayuntamiento de Llíria sólo puede adoptar una postura en este tema: “Velar por el cumplimiento de la ley y respetar la decisión que se toma en una entidad privada”. A esto ha añadido el propio Izquierdo: “El Ayuntamiento no decide si se derriba o no se derriba el teatro, simplemente podemos debatir la descatalogación del edificio, que ya cuenta con el informe favorable de Patrimonio. Todo lo demás es una decisión de los socios”.
Críticas desde la oposición
La lectura que se hace desde la oposición de estas palabras y de la decisión tomada por el alcalde es muy distinta. Así, el portavoz de Iniciativa per Llíria, Paco García Latorre, considera que Izquierdo “se posiciona claramente en este asunto a favor de la demolición”. Además, desde esta formación se recuerda que ya se acordó unánimemente en un pleno “catalogar y proteger los dos teatros de Llíria [el de la unión Musical y el de la Banda Primitiva], con lo que descatalogarlo ahora tiene una difícil justificación, más allá de informes partidistas”.
Por su parte, desde el BLOC de Llíria se admite que, aunque las diferencias que existen entre las dos posturas enfrentadas en el seno de la Unió Musical respecto a este asunto “deberían resolverse dentro de dicha entidad”, no deja de ser cierto que el Ayuntamiento “tiene mucho a decir, ya que esta asunto afecta al conjunto de la sociedad edetana”. Además, recuerdan que “la responsabilidad final de cualquier planteamiento urbanístico en Llíria recae sobre el propio Ayuntamiento”.
Además, desde el BLOC califican como “erróneas y confusas” las declaraciones del alcalde, Manuel Izquierdo, sobre la supuesta incapacidad del consistorio para poder asumir una mayor capacidad de decisión en este asunto: “El prestigioso arquitecto Salvador Vila, que ha restaurado la catedral de Valencia y el Monasterio de La Valldigna, ha manifestado al respecto que el consistorio tiene la última palabra y que será responsable de lo que le suceda a este edificio tan emblemático de nuestra ciudad”.