Con motivo del inicio de las fiestas patronales de San Miguel, el Ayuntamiento de Llíria ha celebrado esta tarde el acto de entrega de las distinciones honoríficas de 2012. En esta ocasión, han sido galardonados los músicos Juan Garcés Queralt y José María Malato Ruiz (de forma póstuma) con el título de Hijos Adoptivos, y la ONG Cáritas ha recibido la Medalla de la Ciudad.
Pau Tineo
El alcalde Manuel Izquierdo ha destacado que los dos músicos homenajeados “han dejado un profunda huella en uno de los más importantes tesoros culturales de nuestra ciudad, las bandas de música”. “Con su inmenso trabajo, han realizado una gran aportación para que Llíria sea reconocida internacionalmente como la Ciudad de la Música. Por ello, siempre serán recordados y admirados por la sociedad edetana”, ha añadido.
Por su parte, Manuel Izquierdo ha ensalzado “los valores solidarios de la acción social de Cáritas en favor de los vecinos más necesitados del municipio”, y ha destacado “la labor altruista de los voluntarios que la integran, que mantienen un compromiso diario con la personas y la mejora de su calidad de vida”.
El alcalde de Llíria, acompañado por el concejal de Cultura Salvador Oliver, ha entregado en la ceremonia las distinciones a Juan Garcés, directivos de la Banda Primitiva que la han recogido en nombre de la familia de José Mª Malato, y representantes de Cáritas de la localidad.
Méritos de los galardonados
El maestro Juan Garcés, nacido en Benifairó dels Valls en 1914, obtuvo sus primeros éxitos profesionales como director de la Unió Musical de Llíria, estando al frente de la misma entre 1944 y 1953. Dirigió a esta banda sinfónica en la inauguración de su teatro en el año 1949 y obtuvo diversos premios en el Certamen de Valencia. Garcés tiene la Medalla de Oro al Mérito del Trabajo y un doble Récord Guinness por ser el director de bandas civiles con la carrera musical más larga del mundo, el último logrado con la Unió Musical de Llíria.
José María Malato (Tarragona, 1911-1983) fue director titular de la Banda Primitiva de Llíria entre 1960 y 1975, en un periodo conocido como la época dorada de la sociedad, en la que se lograron importantes premios tanto nacionales como internacionales. Además, ejerció una gran labor en el desarrollo de su escuela de música, donde se formaron excelentes profesionales que hoy en día ocupan plazas en orquestas y bandas de toda España.
Por último, Cáritas de Llíria está constituida por cuatro grupos pertenecientes a cada una de las tres parroquias del municipio y la interparroquial. Desde hace décadas, estos equipos, formados por voluntarios de la localidad, desarrollan una destacada labor asistencial a personas desfavorecidas, que en los últimos años se ha visto intensificada considerablemente debido a la crisis.