El Ayuntamiento de Llíria ha iniciado los trabajos de restauración y puesta en valor de los restos del Molí de la Parra. La adecuación de este antiguo molino hidráulico de cereal y su entorno urbano supondrá una inversión cercana a los 100.000 euros. Para ejecutar esta actuación, el Consistorio cuenta con una subvención de 30.000 euros de la Generalitat.
El Molí de la Parra es una de las construcciones hidráulicas más representativas de la época medieval de la ciudad de Llíria. A lo largo del tiempo, la estructura original ha ido sufriendo modificaciones y las características arquitectónicas de los restos existentes datan del siglo XVIII. En la actualidad se conserva del molino parte del pavimento con una muela encastada y las galerías subterráneas con los mecanismos para producir energía hidráulica.
La intervención se centrará en la consolidación y rehabilitación de esta edificación, para que pueda servir como recurso turístico y didáctico con la intención de mostrar a los visitantes el funcionamiento de los molinos harineros en la época medieval. Además, el proyecto contempla la adecuación y urbanización del entorno.
El alcalde de Llíria, Manuel Izquierdo, ha destacado que se trata de “una actuación importante que contribuye a recuperar una construcción del patrimonio cultural y arquitectónico de nuestro municipio, con un alto valor etnológico”. Igualmente, ha señalado que, con esta inversión, “los vecinos del barrio ganarán un nuevo espacio urbano para su uso y disfrute”.