Los trabajos de rehabilitación finalizarán este verano
El vicepresidente tercero del Área de Cooperación Municipal de la Diputación de València, Carlos Fernández Bielsa, junto al alcalde Manolo Civera y otros miembros del Ayuntamiento, ha visitado esta mañana la ciudad de Llíria para comprobar de primera mano el avance de las obras rehabilitación y puesta en valor de la torre del Pont del Vidre, cofinanciadas al 50% por la institución provincial. Además, el encuentro ha servido para abordar otros proyectos que se pretenden ejecutar en el municipio a través de los programas de la Diputación.
Esta actuación, que supone una inversión de 200.000 euros, está prevista que finalice a lo largo de este verano, y servirá para hacer de la torre un monumento visitable y accesible, además de permitir una nueva vía de acceso al casco histórico de la localidad.
Los trabajos contemplan la restauración de la muralla, la consolidación de la torre, la apertura de un nuevo acceso en la Vila Vella y la reurbanización del tramo de vial de la calle San Juan de Mata. Además, también se está realizando un exhaustivo seguimiento arqueológico, que permitirá documentar las técnicas constructivas empleadas, así como los materiales romanos reutilizados para su edificación.
El primer edil, Manolo Civera, ha recalcado que estos trabajos “materializarán el proyecto que inició el Ayuntamiento en los años 90, cuando aprobó un Plan Especial de Protección y Rehabilitación para la Vila Vella (PEPRI), con el objetivo de regenerar urbanísticamente este barrio, aprovechando la puesta en valor de sus elementos patrimoniales, como el Pont del Vidre mediante su restauración”. De esta manera, también, “la ciudad recupera este enclave, entre los recursos turísticos de su ya importante patrimonio histórico”.
La torre del Pont del Vidre, construida en el siglo XIV, formaba parte del circuito amurallado de la Llíria medieval. Este monumento ha vivido grandes transformaciones a lo largo de su historia, que han dejado una gran huella en el edificio. Las más importantes, sin duda, son las que se produjeron en el siglo XX cuando, una vez perdido el carácter defensivo de murallas y torres, se construyeron viviendas y corrales en las antiguas estructuras medievales.