Miembros de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Camp de Túria han ocupado esta mañana de manera indefinida la sucursal de Bankia en Llíria para denunciar el “acoso absoluto” al que, según la plataforma, la entidad bancaria “está sometiendo a Paula”. Afirman que no se irán sin una solución: “estamos dispuestas al desalojo forzoso”.
P.G.
Paula es madre soltera y, en estos momentos, está al borde del desahucio, porque Bankia le reclama su vivienda, que será subastada el próximo 8 de enero, si nadie lo impide por no poder hacer frente al pago de las cuotas, “como muchas de nosotras”, según explican desde la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) de Camp de Túria.
Miembros de esta plataforma han ocupado la sucursal de la entidad bancaria ubicada en la calle Sant Vicent Ferrer, 28 para exigir la dación en pago para Paula. “No permitiremos que Paula continúe con este sufrimiento, ni permitiremos que siga pensando en quitarse la vida por culpa de una banca mafiosa y extorsionadora que está dispuesta a ejercer de proxeneta con tal de obtener más y más dinero”, aseguran.
La afectada en este caso, se compró una vivienda en el año 2006 con una hipoteca concedida por Bankia con la condición de que sus padres fueran su aval. En 2009, empieza a tener problemas para pagar y se marcha a vivir a casa de sus padres y alquila la vivienda para abonar las cuotas mensuales.
En 2012 se queda sin inquilinos y en agosto de ese mismo año se produce el primer impago de cuota. Tres meses después, apuntan desde la plataforma, es cuando Paula contacta con la PAH en busca de una solución.
A través de un comunicado, desde la plataforma explican que durante todo ese tiempo, Paula “ha pasado por un auténtico calvario, todo por tratar de pagarle a Bankia lo que no puede pagar. Tanto es así que se vio abocada a ejercer la prostitución durante dos semanas, pensando que no le quedaba más alternativa para solventar su deuda”.
En estos últimos dos años, aseguran que no han parado de buscar una solución: han solicitado en cinco ocasiones la dación en pago; han contactado con los abogados del ICAV; y se han reunido en dos ocasiones con Ernesto Escorihuela, responsable de recuperaciones de Bankia, sin éxito.
El pasado mes de julio, según la plataforma, “tras enterarse de que preparábamos una acción reivindicativa por el caso de Paula, Bankia contactó con ella y le comunicó que la dación en pago le había sido concedida. Sin embargo, pasado el verano, Paula contacta de nuevo con Bankia, donde le informan de que han cambiado de idea, y le deniegan la prometida dación”.
En el comunicado denuncian que “durante todo este proceso la presión ha podido con la salud tanto física como mental de Paula, que ha sido diagnosticada de una enfermedad psiquiátrica severa, ha sufrido un aborto de embarazo de gemelos, y que trata de pelear día a día contra ideas suicidas”.
Además, concluyen, “su madre, avalista en su hipoteca y quien Bankia le reclama la deuda, fue diagnosticada de cáncer de pecho a finales de 2012 y tuvo que ser tratada con radioterapia e intervención quirúrgica”.