En los últimos meses se ha vivido una situación de enfrentamiento en el seno de la Unión Musical de Llíria, agrupación musical de reconocido prestigio, en la cual convivían dos corrientes: una de ellos creía válida la posibilidad de derruir el Teatro-Auditorio de la sociedad, para construir otro nuevo; la otra otro consideraba que esa opción no podía tomarse en consideración.
El clima de confrontación llevó a que el anterior presidente de la Unión Musical, José Vicente Alcaide, sufriera un lamentable ataque que lo hizo dimitir de su cargo, en el cual se había mantenido durante los últimos 15 años.
Todo este asunto arranca del compromiso obtenido por el anterior presidente de la Unión Musical, José Vicente Alcaide, quien logró una subvención de la Generalitat Valenciana (que ascendía a 3 millones de euros), para derruir el Teatro-Auditorio y construir otro nuevo, más amplio y mejor condicionado acústicamente, según se explicaba entonces. Hubo una Asamblea, en febrero de 2009, en la cual dos tercios de los votos emitidos se mostraron a favor de la demolición y la construcción de la nueva sala de conciertos.
A partir de ese momento se empezó a organizar una corriente crítica con esta decisión. El descontento de esta minoría fue tomando forma y, finalmente, se determinó celebrar una Asamblea Extraordinaria, que decidiera la composición de la nueva Junta Directiva de la Unión Musical. A estas elecciones se presentaron dos candidatos: Enrique Aragón, considerado como continuista y favorable a la demolición y construcción de un nuevo Auditorio; y José Vicente Pedrerola, en contra de esa posibilidad y favorable a la conservación del actual edificio.
La jornada de elección fue tensa, después de una campaña considerada por los opositores como poco transparente, y el escrutinio lanzó el siguiente veredicto: de los 793 votos emitidos, 399 votaron a favor de Pedrerola; 394, a favor de Aragón; 17 votos se emitieron en blanco; y cuatro fueron nulos. Pedrerola, ganador por un escaso margen (5 votos) explicó, tras el recuento de los votos, que “el Teatro de la Unión Musical de Llíria se mantendrá en pie en los años venideros”.