El alcalde de Llíria y el arzobispo de Valencia asisten al traslado de la imagen del monasterio hasta la parroquia de la Asunción
La tradicional Baixà de Sant Miquel ha vuelto a congregar a miles de vecinos que han acompañado el traslado de la imagen del patrón desde su Real Monasterio hasta la iglesia parroquial de la Asunción. El alcalde de Llíria, el socialista Manolo Civera y concejales de la nueva corporación municipal han participado en el acto al que ha asistido el arzobispo de Valencia, el cardenal Antonio Cañizares, que presidió la misa.
El acto religioso ha tenido uno de sus momentos emotivos con el encuentro del arcángel con el copatrón de la ciudad Sant Vicent Ferrer, a la altura de la Orquesta de Plectro El Micalet de Llíria. En este lugar, la agrupación musical ha ofrecido una pequeña actuación en honor a los dos santos.
El alcalde de Llíria, Manolo Civera, y concejales de la corporación municipal han participado en la Baixà de Sant Miquel, a la que también ha asistido el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, para presidir la misa y pregón religioso de las fiestas.
Esta tarde, la imagen del patrón recorrerá en una procesión interparroquial las calles de la localidad. Finalmente, la imagen volverá a su monasterio el próximo viernes desde la parroquia María Madre de la Iglesia. Una vez en el monasterio se celebrará una misa por los difuntos de la localidad y de despedida y de acción de gracias de las fiestas.