El PSOE pide el cambio en el nombre de las ‘calles franquistas’ y el ayuntamiento pone como condición que los vecinos apoyen esa modificación

La agrupación socialista de Loriguilla reclama la aplicación de la Ley de Memoria Histórica en el municipio, ya que aseguran los socialistas que en la actualidad existen 5 calles “con reminiscencias franquistas, junto con una placa del dictador Francisco Franco en la entrada al Ayuntamiento de la localidad”. El equipo de gobierno, con mayoría del PP, justifica la actual situación en la oposición a dicha actuación entre los residentes en las citadas calles.

José García

En diciembre de 2007, el Congreso de los Diputados aprobó la conocida como ‘Ley de Memoria Histórica’; en el artículo 15 de la misma se establecía que los escudos, insignias, placas y otros objetos o menciones conmemorativas de exaltación personal o colectiva del levantamiento militar, de la Guerra Civil y de la represión de la dictadura “deberán ser retiradas de los edificios y espacios públicos”; dicha actuación no se deberá aplicar “cuando concurran razones artísticas, arquitectónicas, o artístico-religiosas protegidas por la ley”, hecho que puede aplicarse a iglesias y templos de culto.

Según explican desde el PSOE de Loriguilla, ninguna de esas circunstancias se produce en las cinco calles del municipio en las que existen “reminiscencias franquistas”: la avenida de Nicolás Franco (hermano del dictador), la calle Gabriel Vaquero de la Cruz (Instituto Colonización), avenida del Caudillo, la calle José Antonio Primo de Rivera (fundador de Falange Española) y la calle Díaz Ambrona (ministro entre 1965 y 1969). Además, en la fachada principal del ayuntamiento existe una placa del traslado del municipio en 1968, en cuyo interior resalta el rostro del dictador.  

En opinión de los socialistas el alcalde de Loriguilla, el popular José Javier Cervera, “se niega a retirar los recuerdos y símbolos de una fase de la historia de España ligada a la represión y la eliminación de los derechos sociales y las libertades públicas; somos uno de los pocos reductos que actualmente rinde homenaje al dictador sin ningún tipo de explicación”. Desde el PSOE se insta al gobierno local a modificar su postura y a cumplir con lo establecido en la citada ley.

El primer edil del municipio, por su parte, asegura que está a favor de cumplir con la Ley de Memoria Histórica, “aunque hemos constatado que existe oposición de los vecinos a la modificación del nombre de las calles, y no sólo en estos casos. Los problemas burocráticos que se derivan del cambio del nombre de las calles, lo que implica modificaciones en los distintos documentos oficiales de quienes residen en las mismas, ha motivado nuestra postura”.

“Estamos dispuestos a cambiar todos los nombres que sea necesario, siempre que la mayoría de los vecinos que residen en cada una de ellas se manifieste conforme con esa actuación y cuando exista acuerdo en la elección del nuevo nombre de la vía. No queremos generar molestias en unos vecinos que nunca han efectuado peticiones a favor del cambio del nombre de las citadas calles y que, por el contrario, siempre se han posicionado en contra de ese tipo de cambios”, concluye José Javier Cervera.