La viabilidad económica de la Guardería Municipal de Marines peligra, según apunta la alcaldesa de la población, Lola Celda. El Centro de Educación Infantil ‘El Castell Xicotet’ va a dejar de recibir 7.000 euros de la Conselleria de Educación, tras habérsele denegado un cambio de uso de una de sus aulas.
José García
Este centro dispone de 3 aulas: una de 0-1 años, con 8 plazas; otra de 1-2 años, con 13 plazas; y la última, de 2-3 años, con 15 plazas. El Ayuntamiento deseaba convertir la de 0-1 años en una aula para niños de 0-3 años, dado que la demanda en ese intervalo de edad es mayor.
La Conselleria se ha negado, alegando que el centro carece de un aseo para profesores adaptado a personas con mobilidad reducida, como se establece en un decreto aprobado en 2004.
La alcaldesa replica que ese requerimiento no fue impedimento en 2006 para que se recibieran las ayudas que ahora se deniegan y añade que esa norma, según se establece en su letra, “sólo se debe aplicar en obra nueva, rehabilitación de edificios existentes o cambio en el uso del edificio”, no dándose ninguno de esos casos.
La primera edil critica que se esté obligando al consistorio a subir las tasas del servicio a los padres de los alumnos “mientras la conselleria reduce, año tras año, la asignación a los centros; y, ya el año pasado, esta Escoleta Infantil arrojó unos resultados deficitarios de casi 5.000 euros, que debió soportar el Ayuntamiento. ¿Qué sucederá al próximo curso, si se nos deniega una ayuda de 7.000 euros?”.
La conselleria de Sanidad sí ha aceptado un aumento de ratio en el centro, pasándose de 36 a 40 alumnos; pero ninguno de esos 4 recibirá aportación económica de la Consellería, el próximo curso.