El alcalde de Nàquera, Ricardo Arnal, y el concejal de Seguridad Ciudadana y Fiestas y también teniente de alcalde de esta misma localidad, Vicent Estellés, acudieron ayer al juzgado nº 5 de Llíria para declarar en calidad de imputados en un presunto delito ecológico.
La naturaleza de los cargos se desprende de la actuación de la Fiscalía de Medio Ambiente, que observa indicios de delito en los hechos acontecidos el 4 de octubre de 2006 (en el que se celebraban las fiestas locales en honor del patrón, San Francisco de Asís): ese día se disparó un castillo de fuegos artificiales a 500 metros del Parque Natural de la Sierra Calderona, pese a que la Generalitat Valenciana había decretado el nivel 3 de preemergencia, que prohibe hacer fuego por existir un elevado riesgo de que se produzca un incendio.
Según la Fiscalía, existe una relación causa-efecto entre el disparo de este castillo de fuegos artificiales y el incendio que se declaró ese mismo día en el parque natural y que causó la quema de más de 2.000 hectáreas. Esta conclusión que sostiene la Fiscalía se fundamenta en los restos de material pirotécnico que fueron encontrados por la Guardia Civil durante las investigaciones que tuvieron lugar en la zona.
Según parece, tanto Arnal como Estellés han alegado en su comparecencia en los juzgados que el consistorio había adoptado las medidas oportunas, en materia de seguridad, a las que obliga el plan de quemas para este tipo de espectáculos. También han manifestado su desconocimiento sobre la alerta que prohibía disparar el castillo de fuegos artificiales. Desde el principio, los máximos dirigentes del consistorio popular de Nàquera han considerado que el incendio se debía a la acción de un pirómano y nunca han dado credibilidad a la posibilidad de que éste se debiera a los fuegos artificiales.
La postura de la oposición
InfoTuria ha intentado contactar en varias ocasiones con Ricardo Arnal y Vicent Estellés, pero no ha sido posible contar con sus declaraciones respecto a este asunto. Sí ha sido posible conocer la postura que mantienen los representantes de los tres partidos en la oposición de Nàquera: PSPV-PSOE, IVIN y Unió Valenciana.
Los líderes de cada una de estas formaciones han coincidido en señalar que todos ellos han solicitado de forma conjunta tener acceso a los distintos expedientes e informes elaborados respecto a este asunto, sin que se hayan atendido sus requerimientos. Además, también trataron de solicitar en un pleno extraordinario la dimisión del alcalde, así como su suspensión de militancia en el PP, pero ambas propuestas fueron denegadas al hacer uso el equipo de gobierno de sus votos (en la actualidad, el PP tiene mayoría absoluta en el consistorio de Nàquera).
Vicente Moreno, líder del PSPV-PSOE ha explicado que no cree posible que Arnal o Estellés pudieran desconocer la situación de preemergencia decretada por la Generalitat: “Todos los días se produce una llamada del 112 a los municipales, para que conozcan la situación actualizada. ¿Y precisamente ese día no hubo aviso?”.
Tampoco cree válida la posibilidad de que el incendio fuera provocado por un pirómano; cree que la causa más lógica del incendio fueron los fuegos artificiales: “Además de los dos focos que, según parece, hubo en el Parque Natural, hubo varios incendios en la población: uno cerca del barranco, otro próximo a la ermita y uno dentro de un corral dentro de la población. Afortunadamente, ninguno tuvo mayores consecuencias. Por otro lado, mucha gente decía, ese mismo día, que caían restos de material pirotécnico aún quemándose y que podían provocar cualquier desgracia”.
El líder de Unión Valenciana, José Manuel Miralles, explica que recientemente se solicitó un pleno extraordinario en el que se iba a solicitar “la dimisión del alcalde y la del teniente de alcalde, por su imputación en este caso”. Además, se solicitaba la entrega de todos los expedientes referidos al asunto: “Pedimos los documentos elaborados por brigadas forestales, policía científica, fiscalía, etc. No se nos dio ninguna información al respecto”.
Además, el pleno se vio reducido a las votaciones, ya que no fue posible exponer los argumentos que querían esgrimir los representantes de cada partido opositor: “A mi se me amonestó por tratar de solicitar explicaciones al respecto. Es la tónica habitual en este Ayuntamiento: denegar la palabra a la oposición, denegarle el acceso a los documentos públicos. No se trata de diferencias políticas: el alcalde debe entender que somos representantes de la ciudadanía, y que debe responder a nuestras preguntas, que son las que se hacen los habitantes de la población. Tenemos derecho a exigirle respuestas y él debe dárnoslas”. Y añade: “El hecho es muy grave, no sólo por su alcance natural… puede añadirse, al delito ecológico, la prevaricación: es decir, actuar a sabiendas contra unas leyes que se conocen”.
Álvaro Cuadrado, cabeza de lista de Iniciativa Vecinal Independiente por Náquera (IVIM), nos comenta que también se solicitó que el Partido Popular aplicara sus propios estatutos y que, debido a la imputación de estos cargos públicos, suspendiera de su militancia en el PP tanto a Arnal como a Estellés. “Pero el PP aprovechó su mayoría absoluta para silenciar nuestras demandas en un par de minutos, simplemente votando en contra de nuestras propuestas y sin darnos la palabra para poder expresar nuestras posturas”.
Según el dirigente de IVIM, tanto su formación como Unión Valenciana “están estudiando personarse en el procedimiento”, para poder exigir las responsabilidades políticas y judiciales en caso que se demuestre una actuación punible por parte de los dos imputados.