El ayuntamiento de Nàquera ha declarado “persona non grata” al portavoz del sindicato CC.OO. en dicha localidad, Manuel Montaner. Esta actuación se ha adoptado, según han declarado fuentes del consistorio, “por el no cumplimiento de unos acuerdos adoptados por la corporación municipal y los representantes sindicales de CSI-CSIF, UGT y CC.OO.”. Estos acuerdos pretendían aparcar la ejecución de una sentencia que anulaba 21 plazas de funcionarios en el Ayuntamiento de Náquera.
José García
El alcalde de la localidad, el popular Ricardo Arnal, ha tomado esta decisión después de denunciar que Manel Montaner ha incumplido un compromiso adoptado, de forma conjunta, con los otros representantes sindicales de la localidad para solicitar el archivo en la ejecución de las sentencias que invalidaban la vigencia contractual de 21 plazas de funcionario. Según fuentes del consistorio, este cambio de postura se produjo en la última mesa de negociación.
La no aplicación de estos acuerdos supone que 21 empleados del consistorio, con la condición de funcionarios, van a cambiar su categoría profesional a “trabajadores laborales”, según explicó el concejal de Personal del Ayuntamiento de Nàquera, Enrique Fraile. “Una forma paradójica de defender los intereses de estos trabajadores”, ha manifestado el propio Fraile.
Respuesta de CC.OO.
CC.OO., sindicato al que pertenece Manuel Montaner, ha emitido un comunicado de respuesta a la actuación del Ayuntamiento de Nàquera y los sindicatos UGT y CSIF. En dicho documento, los representantes de CC.OO. respaldan la actividad sindical de Montaner, a quien consideran legitimado por las dos resoluciones judiciales, y consideran la respuesta del alcalde de Náquera como una “pérdida de los papeles”.
Desde CC.OO. se critica que la ejecución directa de la sentencia, frente a otras fórmulas más adecuadas y menos lesivas: “Todo este procedimiento se inició en 2006, tras apartarnos del proceso negociador, con una alegación a la resolución adoptada en un pleno. Posteriormente, ante la marginación a la que se nos sometió, hubo un recurso contencioso-administrativo y, finalmente, se tuvo que acudir a los tribunales”, señala Montaner.
“Además, la sentencia favorable a nuestras demandas establecía un período para alcanzar un acuerdo sin tener que ejecutarse de un modo directo. Pero el Ayuntamiento y los otros sindicatos han preferido no negociar, con la intención de presentarnos ante la opinión pública como un sindicato que no está a favor del empleo estable y los derechos de los trabajadores”, añade Montaner.
Por último, desde CC.OO. se reclama “negociación y transparencia” para mejorar las condiciones laborales de los trabajadores y critican el “unilateralismo y la imposición de criterios” que, dicen, define actual equipo de gobierno de Náquera.