La formación política IVIN, que integra el equipo de gobierno tripartito que ejerce el gobierno en la localidad de Náquera, ha presentado otras dos propuestas que han generado nuevas acusaciones de “chantaje”, desde el PP local.
José García
Ya en la semana pasada tuvo lugar una situación similar: IVIN transmitió una serie de propuestas al equipo de gobierno que fueron tomadas como “muestras de chantaje” por el PP, que interpreta las iniciativas abanderadas por IVIN como ataques a sus socios de gobierno local: UPdN y PSOE
Dos son las propuestas de IVIN que han vuelto a desatar las críticas del ex alcalde de Náquera, el popular Ricardo Arnal, hacia el actual equipo de gobierno local, suponiendo ambas una modificación del estado de la plantilla de personal que trabaja para el consistorio naquerano.
La primera es la ‘amortización’ de la plaza del arquitecto municipal, es decir, la extinción de dicha plaza. Consideran desde IVIN que, dado que la persona que venía desempeñando dicha función ya está en edad de jubilación “y el sector de la construcción y urbanismo se encuentra absolutamente paralizado”, es posible prescindir de esa plaza y se le pueden asignar las tareas que venía desarrollando esta persona al arquitecto técnico municipal. Añaden a este, desde el equipo de gobierno, que existe un informe del abogado del Ayuntamiento que avala dicha postura.
No comparte esa postura Ricardo Arnal, quien considera que el argumento esgrimido por IVIN (y que alude a la posibilidad de ahorrar costes al Ayuntamiento) no se ajusta a la realidad. Cree el ex alcalde que prescindir del arquitecto municipal “es un hecho a todas luces ilegal, que dejaría al Ayuntamiento sin un técnico cualificado para cuestiones de Urbanismo”.
La segunda propuesta de IVIN se refiere a la figura del Jefe de la Policía Local de Náquera: según Arnal, lo que pretende el equipo de gobierno es “manipular al personal que trabaja en el Ayuntamiento, para lograr que el actual Jefe de Policía se convierta en Inspector”.
Desde la corporación naquerana se desmiente la postura mantenida por el antiguo primer edil de Náquera. Explican fuentes consistoriales que ya en el documento presentado por IVIN se hace constar el actual marco legal por el que se establecen los ratios que obligan a un Ayuntamiento a dotar a un municipio de su Inspector de Policía Local: “Existen unos baremos que establecen cuántos agentes debe haber para que exista un cabo, y cuántos cabos hacen falta para que la Policía Local cuente con su Inspector”.
Según añaden estas mismas fuentes, el personal que se presente a las pertinentes pruebas deberá acreditar su cualificación y su preparación para ejercer dicha responsabilidad, “tal y como ha venido sucediendo desde que el actual tripartito ostenta el poder político en Náquera”.