Importancia de los abogados en los divorcios con hijos

Poner fin a un matrimonio donde hay niños de por medio es un proceso bastante tedioso, tanto emocional como legalmente, debido a que lo primordial es velar por el bienestar de los menores. Por tal razón, es bueno conocer la importancia de los abogados en los divorcios con hijos. 

Cuando una pareja contrae matrimonio y deciden iniciar una familia, lo hacen con la ilusión y objetivo de que éste perdure con el tiempo. Sin embargo, es posible que esto no pueda cumplirse, pues por distintos motivos, la relación entre la pareja se puede ver afectada y la decisión de poner fin a la unión, se convierte en necesaria. 

No obstante, si en el matrimonio hubo descendencia, la separación debe llevarse a cabo procurando siempre el bienestar de los hijos, sobre todo si éstos son menores de edad. Por tal razón, aquí hablaremos sobre la importancia que tienen los abogados en los divorcios con hijos. 

Los abogados son necesarios en los divorcios con hijos involucrados

Los abogados especializados en Derecho de Familia serán los encargados de llevar a cabo todo el proceso del divorcio, velando siempre por el bienestar de todos los implicados, especialmente si hay hijos involucrados, siendo el objetivo principal encontrar solución a todas las disyuntivas existentes. 

De este modo, los abogados estarán al lado de los clientes durante todo el tiempo que duren los procesos, e igualmente, de manera extrajudicial, siendo la máxima de los representantes legales mantenerse cerca de sus clientes; trabajando así con bases firmes tales como la seriedad, el compromiso y la confianza.   

En este sentido, los abogados especializados en divorcios se darán a la tarea de analizar las condiciones del cliente con respecto a la familia, el trabajo y su patrimonio. Con ello, lo que se busca es brindarle las alternativas y soluciones más convenientes para cada caso, para que de esta forma, se pueda crear un convenio regulador del divorcio conforme a las necesidades e intereses de la clientela.      

Asimismo, tienen la experiencia para llevar a cabo cualquier tipo de divorcio, siendo los más recomendados los de mutuo acuerdo o por notaria, debido a que éstos se caracterizan por ser procesos más amistosos y rápidos. Sin embargo, también tienen la capacidad de hacer frente a un divorcio contencioso, siendo éste el que, por lo general, debe desarrollarse cuando hay hijos de por medio y se solicitan medidas para la guardia y custodia de los niños, el régimen para las visitas, la pensión alimenticia, la compensatoria, etcétera.

El bienestar de los hijos es lo principal 

Tal como se indica en el enunciado, cuando se ejecuta un divorcio donde hay hijos menores de edad en el medio, los abogados resguardarán principalmente el bienestar de los mismos, por lo que entre los aspectos más relevantes a asegurar está la pensión de alimentos hijos, con la que se asegura un importe obligatorio de parte del padre que no posee la custodia con respecto a la manutención de los niños, que tiene el objetivo de cubrir las necesidades básicas de los mismos, como la alimentación, vestimenta, educación, salud, etcétera. 

El importe de dicha pensión será estimada de acuerdo a la condición económica del padre al que corresponda asumirla. Para ello, se consideran tanto sus ingresos como los gastos esenciales que éste deba cubrir, tales como alimentos y vivienda, por ejemplo. Igualmente, la cantidad de dinero estará sujeta a cambios según varíe la economía del progenitor responsable.

Finalmente, el aspecto de la custodia compartida hijos juega un papel fundamental, debido a que con esto se determina la convivencia que habrá entre padres e hijos, una vez se dé la separación, y procurando que ésta sea lo más equitativa entre ambos padres, para que ambos disfruten de tiempos similares en la crianza de los menores. 

En este sentido, los abogados especialistas consideran las capacidades y destrezas de ambos padres en su rol antes de la separación; asimismo, las distancias entre las viviendas, el cumplimiento de las responsabilidades como progenitores y las condiciones de la vivienda donde se residen, debido a que éstas deben ser adecuadas para el desarrollo del menor.