La prolongación de la línea iría sobre la antigua plataforma de ferrocarril de València a Llíria
La Conselleria de Obras Públicas ha iniciado la licitación del contrato de servicios para la redacción del estudio de viabilidad de ‘Prolongación de la línea de metro en Riba-roja de Túria‘ con un presupuesto de 33.880 euros y un plazo de ejecución de 12 meses.
En la reunión telemática que ha mantenido el conseller Arcadi España con el alcalde de Riba-roja, Robert Raga, el conseller ha explicado que “este contrato tiene como objetivo estudiar la viabilidad técnica y económica de reubicar la estación de Metrovalencia en el casco urbano de Riba-roja, lo que facilitaría el uso del transporte público al mejorar los tiempos de recorrido de los usuarios y usuarias a la estación”.
Arcadi España ha añadido que la Generalitat “inicia el proceso que da respuesta a una larga reivindicación de los vecinos de Riba-roja y que se enmarca en el objetivo de conseguir un transporte público más accesible, seguro y eficaz, que sea una alternativa real al vehículo particular”.
La actual estación de Riba-roja se localiza en el extremo este del núcleo urbano, muy próxima a la entrada de la población a través de la CV-370 y la última estación de la red de Metrovalencia Riba-roja de Túria, tramo Aeroport-Rosas.
La prolongación de la línea de Metrovalencia se llevaría a cabo sobre el corredor de la antigua plataforma de ferrocarril de ancho ibérico de València a Llíria que fue construida en 1889. Las condiciones de deterioro y falta de rentabilidad determinaron que Renfe cerrara el tramo entre Riba-roja y Llíria en 1984, manteniéndose el servicio de cercanías entre Valencia y Riba-roja de Túria.
Ante la necesidad de dotar de un sistema de transporte público de calidad para el eje València-Riba-roja por su creciente importancia dentro del ámbito metropolitano, la Generalitat inició los contactos con el Ministerio de Fomento para el traspaso de titularidad de la línea y su reactivación
El estudio de viabilidad deberá abordar las soluciones. En este sentido, se analizarán las alternativas propuestas en los estudios y proyectos elaborados con anterioridad, así como su viabilidad actual. Se podrán estudiar nuevas alternativas en función de los nuevos condicionantes.
La definición de alternativas se centrará en el trazado y el ámbito de la urbanización que puede ser subterráneo o en superficie, ubicación de la estación, integración con la accidentada orografía sobre la que asienta la población, necesidad de crear un aparcamiento disuasorio junto a la estación, entre otros, y en la mejora de las frecuencias si de ellas se derivara un incremento de la demanda. En las alternativas planteadas se deberán tener en cuenta los aspectos medioambientales determinantes.
También se plantearán las alternativas donde se analizarán aspectos funcionales, económicos, ambientales y sociales como son análisis de la movilidad, teniendo en cuenta los datos de las encuestas realizadas para el Plan de Movilidad Metropolitana de Valencia (PMoMe); el acceso del transporte público; los itinerarios peatonales y ciclistas; tiempos de recorrido actuales; costes de implantación y operación; afecciones sobre el territorio; impactos sociales y ambientales, y otros factores que se consideren convenientes.
Asimismo, se realizará la evaluación diferencial de la situación origen y de las soluciones adoptadas evaluando y comparando las diferentes alternativas para buscar la mejor solución para la implantación de la infraestructura que pretende diseñarse.
Del mismo modo deberá incluir una estimación de la demanda, estudiar la capacidad y frecuencias actuales, así como un escenario futuro de mejora de las frecuencias, teniendo en cuenta los datos utilizados en el PPMoMe y las actuaciones propuestas, así como los datos actualizados recopilados por FGV.
Igualmente, se deberá hacer un estudio económico-financiero, con la estimación de los costes de la infraestructura y el material móvil, estimación de los costes de explotación, ingresos, etc.