La Generalitat ha invertido en un año 120.000 euros en la mejora del parque público de viviendas de Riba-roja de Túria
La Conselleria de Vivienda ha adjudicado en Riba-roja de Túria dos pisos en régimen de alquiler social a familias con dificultades económicas. La Generalitat trabaja en la reparación de otro piso en el municipio de Camp de Túria, donde en un año ya ha invertido en torno a 120.000 euros en la mejora del parque público de viviendas.
La directora general de la Entidad de Infraestructuras de la Generalitat (EIGE), Blanca Marín, ha asistido hoy a la cesión de los pisos acompañada por el alcalde de Riba-roja de Túria, Robert Raga, y el concejal de Servicios Sociales, Rafael Gómez, con los que han mantenido una reunión para analizar la situación de las viviendas que conforman el parque público de la Generalitat de este municipio.
Marín ha destacado que, en tan sólo un año, la Conselleria de Vivienda ha invertido unos 120.000 euros en el mantenimiento y conservación del parque público de Riba-roja. Las obras de reparación de las dos viviendas que ahora se han cedido, más otra que se cederá en breve, ascienden a cerca de 30.000 euros. Además, está en marcha la reforma de otro piso, con un coste de 10.000 euros.
De esta manera se cumple el compromiso adquirido en una reunión celebrada el pasado enero, en la que la conselleria anunció que este año repararía cuatro viviendas sociales en el municipio. Por lo tanto, en el primer semestre ya se han reparado tres y la cuarta está en proceso de ejecución.
En esta esta legislatura, la Generalitat ya ha adjudicado en Riba-roja siete viviendas, una de ellas a una familia víctima de violencia de género. Las mejoras de todos estos inmuebles han supuesto una inversión superior a los 71.000 euros.
En la reunión se ha hecho un seguimiento de las actuaciones programadas en el Plan de Intervención Integral Sostenible (PIIS) en el grupo de viviendas públicas iniciado el pasado noviembre en el que el Ayuntamiento de Riba-roja colabora a través de sus servicios sociales.
Una de las primeras acciones fue la organización de reuniones informativas para explicar a los vecinos las nuevas medidas del Consell para flexibilizar el pago de sus rentas a través de bonificaciones. Para aquellos residentes con deudas, también se les expuso las opciones existentes para ayudar a regularizar su situación.
Como segunda fase de este plan citará a cada una de las familias que no están cumpliendo con sus obligaciones como residentes de una vivienda pública.
El objetivo de estas reuniones, que se realizarán con los servicios sociales municipales, es buscar soluciones a sus correspondientes situaciones socioeconómicas y detectar la existencia de casos en que el incumpliendo de sus obligaciones no está justificado.
En estos casos, se iniciará un procedimiento para recuperar la vivienda, permitiendo así dar opción a otras familias que no han podido optar a los beneficios que supone tener una vivienda pública y que llevan años en la lista de espera.