La comitiva partió a la 1 de madrugada del domingo desde la iglesia de San Miguel de Valencia hasta Riba-roja de Túria
Centenares de vecinos de Riba-roja de Túria participaron ayer en el traslado a pie, de madrugada, de la imagen del Cristo de los Afligidos, patrón de la localidad, desde la iglesia de San Miguel y San Sebastián de Valencia para conmemorar el 75 aniversario del traslado de la misma imagen haciendo el mismo recorrido que el 12 de octubre de 1941.
En el traslado, que se prolongaó durante 25 kilómetros, participaron cientos de vecinos de Riba-roja que se desplazaron a Valencia en ocho autobuses y de multitud de personas de las localidades por donde pasó, según han explicado fuentes de AVAN.
La romería salió a la 1 de la madrugada desde la iglesia de San Miguel y San Sebastián en Valencia con la imagen del Cristo de los Afligidos a hombros. Durante la noche los peregrinos recorrieron las poblaciones de Mislata, Quart de Poblet y Manises hasta llegar a la urbanización Valencia la Vella, donde se realizó un acto homenaje junto al lugar donde descarriló el tren en 1946.
La entrada de la imagen del Cristo en la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora se produjo al mediodía acompañado del volteo de campanas manual a cargo de la Asociación de Mestres Campaners de Valencia, según las mismas fuentes.
En 1832 fue donada a la población una imagen de Cristo crucificado, bajo la advocación del Cristo de la Piedad, “que se instaló de forma provisional en la iglesia de San Miguel y San Sebastián de Valencia mientras se construía su capilla”. Una vez terminada, el 12 de octubre de 1832 tuvo lugar el traslado de la imagen, a hombros, desde Valencia hasta Riba-roja.
Posteriormente, en 1885 los vecinos sacaron en procesión la imagen que visitó a todos los vecinos afectados por una epidemia de cólera, que desapareció, y la población acordó cambiar el nombre del Cristo por el de Cristo de los Afligidos.
Tras la destrucción de la imagen original del Cristo en 1936, “el escultor Vicente Tena realizó una nueva gracias a la aportación de 5.000 pesetas por parte de un vecino de Riba-roja, José García Tarazona”, según relatan las mismas fuentes.
Esta nueva imagen “también fue guardada en la iglesia de San Miguel y San Sebastián de Valencia, en recuerdo de la anterior, hasta que el 12 de octubre de 1941 los vecinos de Riba-roja “la llevaron a hombros, desde Valencia, un hecho que ahora cumple 75 años”.