El pleno de Riba-roja de Túria aprueba una ordenanza que regula la instalación de mesas y sillas en las aceras
El pleno del Ayuntamiento de Riba-roja de Túria ha aprobado una nueva ordenanza que regula la instalación mesas y sillas de los bares y los restaurantes en las aceras. La tasa anual es de 4 euros el metro cuadrado y de otros 3 en la temporada de verano, de mayo a septiembre. Las terrazas podrán funcionar entre semana hasta las 23.30 horas en invierno y las 0.30 horas en verano y durante los fines de semana hasta las 0.30 horas y la 1.30 de la madrugada en periodo estival.
La nueva ordenanza establece un precio de 4 euros el metro cuadrado en la temporada completa y de otros 3 euros para el periodo estival, del 1 de marzo al 30 de septiembre, que deberán pagar los propietarios de los establecimientos por la instalación de una terraza con mesas y sillas en el exterior.
En cuanto a los horarios de las terrazas, el periodo de verano -de mayo a septiembre- concluye a las 0.30 horas en días laborables y a la 1.30 horas los fines de semana y el horario de invierno -de octubre a abril- que finaliza a las 23.30 horas los días laborales y las 0.30 horas los fines de semana. Los periodos de las fiestas patronales como la Mare de Déu, els Fadrins y el Cristo cuentan con un horario especial que concluye a la 1.30 de la madrugada.
El tamaño de las terrazas está en función de la extensión de los establecimientos que oscila entre los 60 metros de terraza para aquellos que tienen una superficie máxima de 200 metros cuadrados y los que podrán instalar 200 metros de terraza para los que tengan una extensión de 2.000 metros cuadrados en su interior. Los establecimientos con ambientación musical podrán instalar 60 metros de terraza como máximo.
La ordenanza regula tres tipos de infracciones por parte de los dueños de los establecimientos: las leves que oscilan entre los 100 y los 300 euros, las graves con multas de entre 301 a 600 euros y las muy graves, entre los 601 y los 1.200 euros en total.
La nueva normativa contó con los votos a favor del gobierno -PSPV, Compromís y EU- y de Ciudadanos y la abstención de Riba-roja Pot. El PP, por su parte, votó a favor de la ordenanza pero en contra de la tasa económica anexa.
Según el equipo de Gobierno, “han sido los propietarios de los bares y restaurantes los que han solicitado la puesta en marcha de esta normativa con el objetivo de proteger los derechos y las obligaciones de los mismos de la que carecían hasta ahora”.
El concejal de Fomento Económico, Rafa Folgado, ha destacado que la ordenanza “terminará con los posibles agravios comparativos que existían hasta ahora entre los propios establecimientos en determinadas ocasiones y, además, homogenizamos la instalación de las terrazas en todo el municipio”.