El Ayuntamiento de Riba-roja destina 1,2 millones de euros para los tres próximos años
El Ayuntamiento de Riba-roja de Túria destinará 1,2 millones de euros al programa de catering social, reparto y entrega diaria durante los tres próximos años para atender los cerca de 145 vecinos que reciben la comida a domicilio. El consistorio ha introducido novedades respecto de ejercicios pasados al tener en cuenta la renta de los solicitantes al suprimir las subvenciones para rentas superiores a los 1.800 euros mensuales.
La finalidad pasa por eliminar el “café para todos” que instauró el PP en los años precedentes en el que todos los usuarios del servicio recibían una subvención con el menú a otro sistema que tiene en cuenta la rentas de las personas a la hora de recibir el cátering social. De esta forma, se elimina la subvención anterior y se aprobará una tasa pública que permitirá repercutir el coste total.
La nueva tasa permitirá aumentar en más de un 68% el coste del menú que a diario pagan los solicitantes por el servicio, especialmente para las rentas más elevadas ya que hasta ahora los que ingresaban más de 2.000 euros debían abonar 4 euros y desde ahora se rebaja el baremo para las rentas superiores a los 1.800 euros -200 menos que antes- que deberán pagar el coste total, fijado en 6,75 euros.
El anterior sistema permitía fijar un precio público a través del cual los solicitantes con ingresos mensuales iguales o inferiores a 1.000 euros debían abonar 2,5 euros por menú, los que percibían entre 1.001 y 2.000 euros debían aportar otros 3,25 euros y, por último, los ingresos de más de 2.000 euros mensuales debían financiar el menú con el pago de 4 euros. Este sistema establecía subvenciones públicas para todos los tramos de renta de los solicitantes mientras que ahora se eliminan para aquellas rentas más elevadas.
La nueva modalidad permitirá una mayor “justicia social” al fijar hasta siete tramos de rentas de las personas físicas interesadas en contratar el cátering diario de lunes a sábado que oscila como mínimo desde 1 euro el menú para aquellos que ingresan entre 0 y 250 euros mensuales y un máximo de 6,75 euros el menú para aquellos con percepciones superiores a los 1.800 euros al mes.
Los ingresos entre el salario mínimo interprofesional y 1.000 euros deberán pagar 3,5 euros el menú y, por último, otros 5,5 euros para aquellos que obtengan un sueldo mensual de 1.501 y 1.800 euros.
Las modificaciones del ayuntamiento pasan por obligar al contratista a repartir los menús también en la época de navidad -hasta ahora exenta- en horario de lunes a sábado incluidos.
Los requisitos que se exigirán para optar al menú municipal son estar empadronado en Riba-roja al menos con seis meses de antelación que podrá ser variado con un informe de Bienestar Social, la necesidad de prestación del servicio porque el solicitante vive solo o sus familiares no pueden ocuparse de su manutención y, por último, estar al corriente del pago de las tasas derivadas del servicio. El impago de una mensualidad derivará en la suspensión del servicio.
El anterior sistema de subvenciones impedía repercutir sobre los menús del cátering social el impuesto sobre el valor añadido (IVA) que la empresa adjudicataria cobraba posteriormente al ayuntamiento y desde ahora el precio de la sala de la comida podrá ajustarse mejor al coste real en los casos de mayores rentas económicas de los usuarios del plan municipal.
El equipo de gobierno ha afirmado que las novedades puestas en marcha “persiguen una mayor equidad y justicia social que durante muchos años ha brillado por su ausencia en Riba-roja de Túria ya que el café para todos se ha visto absolutamente superado por las expectativas y desde ahora los receptores deberán ajustarse a unos baremos más justos social y económicamente”.
El ejecutivo ha añadido que los menús que se repartirán a través de este servicio tendrán en cuenta las necesidades médicas de los demandantes con “menús individuales y saludables” testado y controlado por el personal médico en el que se tienen en cuenta obligatoriamente algunos parámetros como la cercanía al lugar de residencia o la imposibilidad de realizarse la comida uno mismo.