La portavoz popular en el Ayuntamiento de Riba-roja de Túria asegura que las presuntas irregularidades contables que recoge el informe del Síndic de Comptes son anteriores a 1995
La portavoz del grupo popular en el Ayuntamiento de Riba-roja, María Jesús Ruiz, ha mantenido que la gestión municipal del PP en el municipio “tiene sus cuentas claras” en relación al informe del Sindic de Comptes sobre el pago de 2,4 millones sin justificar en 2014. El PP asegura que el partido “no es en absoluto responsable” de las presuntas irregularidades contables que los populares fechan con anterioridad a 1995.
Desde el PP apuntan que el informe del Síndic de Comptes remitido al Ayuntamiento de Riba-roja de Túria analiza una partida cuyo importe asciende a 2.925.024 euros que figura en el epígrafe de “otros deudores” y cuyo importe principal en concepto de “pagos sin consignación” es de 2.473.467 euros.
Esta cantidad, según señala la portavoz del grupo popular, “se arrastra en la Cuenta General del Ayuntamiento desde, como poco, antes del ejercicio 1999, cuando ya el informe de fiscalización efectuado por la propia Sindicatura en dicho año, detectó la existencia de dicho saldo contable”.
Al respecto, añade que la cantidad que aparece en 1999 “ya es similar a la que aparece reflejada en 2014, por lo que queda demostrado que desde 1999 hasta 2014, no se ha efectuado pagos sin consignación presupuestaria, por lo que siempre se ha presumido que dicha cantidad refleja pagos sin consignación efectuados con anterioridad a 1995, pero debido a la situación económico-financiera que entonces alcalde entrante del PP encontró cuando entró a gobernar en 1995 fue imposible realizar las averiguaciones para esclarecer los pagos efectuados sin consignación que, como refleja el borrador de informe asciende a 2.473.467 euros”.
Ruiz añade, a través de un comunicado, que estos mismo términos se recogen y reflejan en la página 7 del propio informe de la Sindicatura de Cuentas, donde se indica que “en el informe de fiscalización que esta Sindicatura realizó sobre la Cuenta General del Ayuntamiento de Riba-roja del ejercicio 1999, ya se puso de manifiesto la existencia de un saldo contable de pagos sin consignación por un importe similar al que figura en 2014, y que el Ayuntamiento tenía que esclarecer para su correspondiente tramitación e imputación presupuestaria”.
La actual portavoz de la oposición mantiene que “esta es la realidad de la situación, en la que queda claro que se está hablando de unos pagos que poco o nada tienen que ver con la gestión del PP en el Ayuntamiento”.
La popular aclara que “no estamos en contra de que el Tribunal de Cuentas analice la labor económica. Es incluso deseable y querríamos que se siguiera con la auditoria en este asunto hasta el final, para que se constate de una vez y para siempre desde qué fecha, y de dónde parten esas irregularidades contables”.
A su juicio, “solo de esta forma de podrán esclarecer unos hechos de los que el PP no es en absoluto responsable, por mucho que se pretenda enturbiar y esparcir sospechas sobre el funcionamiento económico de este Ayuntamiento durante los años de mandato del Partido Popular”.