El centro de San Antonio de Benagéber funciona desde hace 600 años
El Colegio Imperial de Niños Huérfanos, creado por San Vicente Ferrer en el año 1410 para acoger y atender a niños huérfanos en la ciudad de Valencia, ha sido propuesto hoy por Cáritas Española como candidato al Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2019.
El colegio de San Antonio de Benagéber, que ha acogido y educado en sus más de 600 años de historia a más de 30.000 niños, está considerado como la institución benéfica en activo más antigua del mundo, porque “ha funcionado de manera ininterrumpida desde su fundación pese a guerras o catástrofes acaecidas en sus diferentes sedes”, según fuentes del centro.
En su estructura única de casa-colegio se convirtió, además, en la primera de Europa que enseñaba a leer y escribir a niñas a finales del siglo XVIII “diferenciándose así de instituciones similares, en las que tan solo se les instruía en labores y música, o en aquello que les pudiese servir para la vida en casa o en conventos religiosos”, según las mismas fuentes.
El Colegio Imperial de Niños Huérfanos San Vicente Ferrer ha recibido la Medalla de Oro de la ciudad de Valencia, la Distinción de la Generalitat Valenciana, el Premio educación y sociedad del Colegio Oficial de Pedagogos y Psicopedagogos de la Comunidad Valenciana o el Premio Justicia de la Generalitat Valenciana.
Con motivo del Año Santo Jubilar Vicentino, concedido por la Santa Sede a las tres diócesis de la Comunidad Valenciana en el 600 aniversario de la muerte de San Vicente Ferrer, ocurrida en la ciudad francesa de Vannes el 5 de abril de 1419, Cáritas Española ha presentado la candidatura del Colegio Imperial de Niños Huérfanos para el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2019.