El Ayuntamiento de Serra ha denunciado que la Conselleria de Medio Ambiente “ha ignorado” la solicitud de un permiso para actuar contra la plaga de tomicus que afecta a más de 25 millones de metros cuadrados -2.500 hectáreas- en la zona de Portacoeli, en la Calderona. El consistorio pretende limpiar con una empresa privada la superficie dañada con “coste cero”.
La propuesta del Ayuntamiento de Serra, encabezado por el alcalde socialista Xavier Arnal, consiste en limpiar y adecentar las áreas afectadas por el tomicus a través de un convenio con una empresa privada “especializada y con experiencia en el sector sin coste económico alguno para las arcas municipales”.
El acuerdo permite un reparto de la masa arbórea resultante de las tareas de limpieza y tala de los ejemplares afectados por la plaga de forma que el 75% es para la mercantil y el 25% restante para el consistorio.
Sin embargo, el consistorio denuncia que la Conselleria de Medio Ambiente no ha respondido “el silencio administrativo ha sido la única respuesta” al escrito que remitió el 25 de septiembre del pasado año y en el que advertía del “efecto devastador y debilitador sobre la población arbórea, en especial sobre los pinos que disminuyen sus defensas naturales y permiten la propagación de plagas que afecta a grandes extensiones forestales del municipio”.
El alcalde de Serra, Xavier Arnal, del PSPV, ha deplorado la actitud de la Generalitat “ante los graves problemas que afectan a la Calderona, en especial por esta plaga letal, y su desprecio ante la propuesta que este ayuntamiento le ha realizado y que, en la práctica, no supondrá desembolso económico alguno para las arcas de la administración autonómico ni para la localidad”.
El alcalde socialista ha insistido en la necesidad de tomar medidas rápidas en el área de Portacoeli “para evitar que la plaga se pueda extender a otras zonas que no están afectadas”.
Los trabajos que el Ayuntamiento considera “urgentes” en el área del monasterio consisten en la identificación de los ejemplares afectados por el tomicus, la eliminación de los pies muertos y aquellos que su estado fitosanitario sea irrecuperable, de forma que la masa forestal afectada pueda mejorar y proteger el monte ante posibles incendios.
Por último, el Gobierno municipal de Serra ha rechazado la directriz de la Conselleria de Medio Ambiente de respetar aquellos árboles afectados por el tomicus que tengan hojas y partes verdes “a pesar de que científicamente son irrecuperables para el ecosistema natural”.